El Bajo Mundo de Humbolt
briéndolo y apenas dejando escapar unos pocos rayos de luz. En el este del firmamento, ya se podían notar las estrellas titilando en la oscur
ltó por completo, se puso de pie y se dispuso a irse. Había estado aburrido desde que llegó. Nadie allí lo conocía y
a punto de atravesar la salida del patio que daba hacia el e
enry Artinel, el hombre con quien m
tiempo. -Miró a la gente que bailaba en l
su familia considera diversión, señor
avor. No estoy acostumb
jado pasar el primer comentar
todos los otros líderes de familia se lo habrán dicho también. Se qu
el hombre que tenía en frente m
ravés de sus acciones. Pero usted... solo es conocido por ser el hijo de
ira, pero la tensión en sus párpados y su temblor facial lo delataban
perfección lo que se siente vivir a la sombra de alguien más. -William dio vuelta
uniforme de mucama. Él se le acercó y le empezó a hablar. Ambos coquetearon, hasta que ella finalmente aceptó seguirlo hasta uno de los dormitorios de la mansión. Allí, se encerraron y s
le importaba cómo se sentía la chica, de hecho, su mente ni siquiera estaba allí. Mantenía una mirada abrumadora de odio y frustración que no cambió en lo más mínimo incluso durante el clímax. No fue hasta desp
duany y su esposa ya compartían cama. Ambos estaban acostad
idad no tenemos
elissa lo miró aliviada
r delante para eso. Debes es
re las sábanas. Entonces, un mensaje llegó al celular de su esposo. Él revisó el pequeño apar
so de pie a un lado de la cama y vol
? -La joven v
as familias, ¿no es así? Nosot
rta y justo antes de cerrarla le
speres d
r la mansión Santos. La fiesta seguía, pero ellos tenían que atender asuntos el día siguient
comentó el líder de los Artinel antes de darle
, pude sentir que algunos de ellos aún sienten desprecio hacia mí. Y no olv
al final tres de ellos estuvier
lo del chico Wol
segundo apellido-. Ellos técnicamente estuvieron p
mica. Estoy a punto de entrar a Las Familias Fundadoras y no debo
su mano y Henr
tua, señor Santos.
n designado al joven. Silver había intentado reunir valor para volver a hablar con Eliel, y al no tener éxito se rindió y fue a descansar. Melissa no notó que su esposo no volvió a la cama, aunque tampoco le importaba si no lo hacía. Henry habló un poc
ábanas. Los conectaba algo más fuerte que la búsqueda de placer y lo demostraban con besos y c
e con los brazos y lo aprisionó contra él. Scott, apoyado en su pecho, podía
volver con
más. Además, después de la fiesta de anoch
on quien ni siquiera puedes compartir cama? -E
-contest
a y miró a su acompañant
or
lo en esta situación. -Miró a su actual compañero de cama con un gesto de complicid
y, recostándose en
ó de sus brazos y lo acomodó en la cama con cuidado. Se sentó a su lado,
spués, se dirigió al baño. Entonces, cuando atravesaba uno de los pasillos que conectaba con la sala de estar,
la perfección que aquella no
o. -Las palabras que susurró hicieron
moniales. ¿Cuántas costumbres arcaicas
! -A pesar de su estado encontró la fuerza suficiente para hablarle a su hermano con firmeza a la vez que evitaba grit
la que estaba contigo. Ninguna pers
compasión. Se acercó a él y extendió
ico que te pido es que seas discreto. -Lo volvió a mirar con seriedad-. Me interesa mantener nuestra al
contestó algo triste
cuidado a lado de su esposa aún dormida. Joel también fue a su
s en sus autos de lujo con vidrios blindados. Lucca notó que Melissa observaba los vehículos alejándose
. -Su padre intentó
l prefirió mant