icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Un año después

Capítulo 5 Novios de mentiras

Palabras:3619    |    Actualizado en: 04/01/2023

rc

última moda, jamás saldría a la calle con el pelo sin arreglar o unas zapatillas bajas. Nuevamente la imagen de Karina, con el camisón de encaje y transparencias, en contraste con el pijama de gatito que Sara tenía hoy, vienen a mi mente… ¿Cómo puede ser que lo segundo me parezca mil veces

Abro el baúl y saco dos cascos. Cuando giro para darle uno

asco. Abre los ojos y la boca con evidente sorpresa y puedo notar su nerviosism

ia ella una vez más. Le coloco el casco y lo ajusto mientras desde donde estoy puedo advertir que su corazón late más fuerte llenándome de ternura. Subo a la moto, la enciendo y espero q

to apoyar su cuerpo sobre mi espalda

na carcajada. Tomo sus manos y las entrelazo a mi cintura. La siento dudar pero cuando arranco

sonreír por el espejo retrovisor. No es raro que me sienta tan bien haciendo sentir bien a otra persona, eso

le dan un aire de exterior que suma hospitalidad al ambiente. Me anuncio con el recepcionista y éste nos

en sus ojos. Es entendible, esperaba encontrarse con mi padre… aunque juraría que no es ese e

extiendo una mano hacia ella, que se incorpora y me devuelve

do ella advierte que ambos tenemos la atención sobre ella se sonroja nuevamente. Veo que sus hermosos ojos color miel se humedecen levemente mientras mira a Romina

entras hago un guiño de ojo imperceptible para Romina pero más que claro para Sara. Ésta me devuelve una sonrisa de lado demostrándome que captó la idea. -De hech

s de contratar a la empresa para la que trabaja. En seis meses mi madre cumple sesenta años y mi padre está pre

de ella deja en evidencia que le parecen completamente inútiles o inentendibles. Es evidente que Sara no es el estilo de mujeres que se desmayen

me mira con cara de espanto. Reflexiono por un momento, es imposible que ha

rena, y me comunico con ella mañana mismo. -Dice l

rásticamente. Baja los ojos y puedo adverti

as no creo que tenga telé

í. Ella responde sin dudar apoyándose en mi pecho y

to por escrito y cuando puedan me confirman.

, por favor. -Contesto

e pensando que pudo interpretar algo diferente de mi intención, que era solamente recibir el pres

nuevamente a Sara, lo que hace

edo evitar dirigir mi mirada hacia su trasero, que se marc

era Lorena o Lucía me estaría riendo de que me haya descubierto, no logro entender porque con ella no me

sa de su parte pero en vez de eso veo una expresión de enojo y furia que me saca totalmente de juego. –Era chiste. -Se

igiéndose hacia la puert

de mi camisa, evitando todo lo posible el contacto. Entonces decido darle una lección y cuando el semáforo da verde comienzo a manejar a más velocidad. Eso la obliga a acer

ada nuevamente y me sorprendo una vez más al recon

a

mi cabello y el sol pegando de lleno en mi rostro hicieron que me olvidara, en el primer tramo del viaje, de los miedos, y en el segundo, de la molestia que me generó verlo mirar con deseo a la mujer que me estaba tratando como una estatua. Lo peor es que estoy segura que él

to nunca en persona, y justamente ahora no tengo la mejor predisposición hacia él, pero intento controlarme, en todo caso, si esta acá es porque algo le

un aire serio, que contrasta a la legu

ene buen gusto, después de Marcos, es el hom

Gracias por venir. -

e saludan y entr

enir, es la internación. Detalla los motivos y fundamentos y cuando termina comienzo con las preguntas que tenía pensadas. El profesional las responde pacientemente y creo que n

se despide prácticamente a las corridas y Marcos y yo n

s en él mis propios sentimien

s se me aflojan de solo pensar cómo lo va a tomar. Lorena no es una mujer fácil, tiene un carácter complicado y siempre logró intimidarme. Pareciera que Ma

me abraza y deposita un beso en mi cabeza. Respondo a su gesto y me quedo unos minutos sintiendo su corazón latir acelerado, lo que me recuerda que él también está pasando por

ias a esto va a estar bien. Vamos

pareja está saliendo y nos permite ingresar, por lo que subimos directamente. Como se trata de un

e del otro lado. Marcos toma su móvil y comienza a llamar a Lorena y escuchamos su teléfono son

os? ¿Forzamo

go que no hab

si nada, la puerta se abre al primer intento. Me mira y es evidente que la s

anta fe, por fav

a decir, pero la voz

n haciendo

as horas que ya van de este día. Recorro con la vista el lugar. En cada rincón hay cajas de comida rápida apiladas, vasos sucios y co

ruzan entiendo que los dos estamos pensando lo mismo: Defin

s. -Dice Marcos con voz decidida,

Me dice ella a mí, si

omo si la estuviera imitando, en tono de reproche y me acerco para abrazarla

a siguiente estas agarrándote a mi hermana. -Dice

esándose, y eso sin dudas cambia toda mi perspectiva sobre esto, sobre él, sobre la relaci

enza a decir él pero el

Los dos están confundidos, no tengo ningún problema con

del ojo que Marcos me clava la mirada como dag

ce él dirig

solas por favor. -Veo el desconcierto en su rostro pero no puedo mantenerle la

unos minutos y la siento llorar así que acaricio su espalda y su cabeza. Cuando noto

que algún día se casaría y tendría una familia la dejó sorpresivamente y ahora la odia. Su trabajo está en la cuerda floja y no se siente capaz de ser la p

a, pero no lo hace. Lo que me da la pauta de que todo su relato está teñido de su falta de percepción de la realidad, así

illo delantero. Se ve tan bien que maldigo por tener que odiarlo. Es verdad que es un hombre soltero y libre, pero bes

e dedica una mirada llena de furia. Tira el cigarrill

nmigo… realmente es increíble. Pasa por mi lado sin mirarme y s

a puerta ventana que da al balcón y

ente molesto. Lo miro con incredulidad pero entiendo que tiene razón. Inspiro hondo y suelt

os acomodar su postura y mirarme ya sin enojo sino más bien con pre

ve que tomar porque no tengo idea de lo que hice anoche ni con quién. No me acuerdo de nada después de las cuatro y me desperté acá hoy, a las dos de la tarde. Supongo que tendría que hacerme también el análisis de HIV y demás, porque no es la prime

un minuto pero corto la con

en solo unos minutos ya recogí todo lo que nos indicaron que iba a necesitar. Antes de s

cabeza. Igual que antes hizo conmigo. Porque ambas somos sus amigas… Y si hay algo m

legando. -Digo c

rena. Asiento y ella se dirige al bañ

lo. Algo en su expresión me genera mucha tristeza, as

mabas. -Digo, mir

cuando estoy muy nervioso. -

? -Suelta una risita y m

olución sea internar a Lorena,

alidad ni yo misma comprendo adecuadamente. Él me mira espe

ndo. -Dice co

quiero

haces es apartarme. Cuando “decidís” que puedo volver, largas la bomba sin adelantarme nada. Supongo

también siento que hay una conexión entre ambos, pero no

epentirme de pronunciarlas. Y me alegro de haberlo hecho cuando veo que su

errumpe el momento y aprovecho para

y emprendemos el regreso al departamento. No hablamos en todo el camino y la trist

Obtenga su bonus en la App

Abrir