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La hija del CEO es mi rival

Capítulo 5 ¡La eterna rival!

Palabras:2012    |    Actualizado en: 03/06/2022

poderse contener— Javier

amante desde hace cuatro años y tú ni por enterada te das… ¿y

… mentira… él nu

buscó, me rogó que lo aceptara ya que estaba harto de ti, lo tenías asqueado, sobre todo

e… me basta con tronarle los dedos para que haga lo que yo qui

esar a tu lado, así que lo mejor es que lo dejes en paz para que p

rada y en la forma en que me hace gozar —insistió Viridiana, sorprendiéndose que Estela, supiera

abladora… ¿no dijiste que me ibas a matar si era verdad que Javier, era mi amante...? Buen

mano a la bolsa que colgaba de su hombro izquierdo y sacó una intimidante pistola, con la cual

orque… te juro que soy capaz d

siempre has necesitado de otros para que hagan las cosas por ti, er

capaz, cuando se propone algo —y en ese momento tomó un filoso cuchillo de la cama que estaba a un lado de ella y que Viri

ice de su mano derecha oprimiera el gatillo provocando que el tronido del disparo se escuchara, en a

over un solo músculo, incapaces de decir algo, como si se hubieran congelado de pronto, ambas t

spalda, en la cama con un notable agujero en el centro de su b

o, su mano se había aflojado y el arma cayó a sus pies pesadamente, sin que ella lo notara ya q

mo si no tuvieran vida, y sin que ella pudiera evitarlo y se desplomó sobre la alfombra

za y suavidad, provocando que Wendy Martí, despertara,

jos al máximo y centró su mirada en aquella varonil figur

o por completo, su cuerpo lucía estético y atractivo,

iosa, incapaz de pronunciar una sola palabra, aunque con los oj

aba decidido y que nada ni nadie lo iba a detener, no le veía los ojos, aunque adivinaba que

nque estaba segura de quién era y además podía intuir que sonreía de esa manera cálida y tiern

o de adivinar cual sería el siguiente movimiento de él, no podí

tomó por los hombros, con suavidad, ternura y firmeza,

varoniles y entreabiertos labios se posaron en su sensual boca, se dejó vencer, anhelaba

sfrutó cuando su boca se vio invadida por aquella inquieta lengua que invitaba a la suy

odearon el cuello del hombre que ahora recorría el hermoso cuerpo de ella con las manos, pr

a que ponerle un alto de inmediato, no estaba bien y no era correcto que lo aceptara, debía fr

lenitud, de aquellos besos y esas caricias que la enloquecían, que la hacían vibrar de p

a despojó de su delicado camisón, sin prisas, y le quitó sus delica

la desnudara por completo, por el contrario, quería mostrarse en

hombre seguían deleitándose con las formas de su estilizado cuerpo despertando en ella sensacione

ió los labios para ahogar el gemido que amenazaba brotar de su boca y lo abrazó al tiempo qu

do sus cuerpos estaban por unirse en uno solo, cuando todo

nng...! —se escuchó el timbre d

a, sentándose en el colchón de su cama, estaba agitada y n

en su recámara, todo había sido un sueño… un maldito y delic

nnggg...! ¡R

a y tomó una bata para cubrirse, mientras se la anudaba y se calzaba las pantuflas respi

nnggg...! ¡Rr

a llamando a su puerta a esas horas, las tres y media de la madrugada de un domingo en el que no tenía actividades laborales, no obstante, debía sabe

iinnng!... —el insistente so

a ella la que abriera la puerta, así que caminó de prisa aca

iguieran llamando con el timbre, tenía la seguridad de que pod

pecto deplorable estaba Germán Domínguez, el hombre de sus sueños eróticos, aquel que ha

rar y con su porte de 1.76 de estatura, 70 kilos de peso, varonil, de facciones agradables, moreno claro, de cuerpo atlético, firme, ves

e necesito hablar contigo con urgencia, se trata de algo que no puede esperar y por eso vi

é es eso tan importante para que hayas venido a mi casa a estas horas? ¿Volviste a pelear

e mucha gravedad —respondió Germán, presuroso, al momento de dejarse caer pesadamente

r un mal momento y tenía que hacer algo para suavizar la situación y que él se relajara

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1 Capítulo 1 El homicidio2 Capítulo 2 La Confrontación3 Capítulo 3 Las Consecuencias4 Capítulo 4 La cruel realidad5 Capítulo 5 ¡La eterna rival!6 Capítulo 6 ¿Y si te lo pido yo 7 Capítulo 7 ¡La vida es lo que es!8 Capítulo 8 ¡Si tan solo…!9 Capítulo 9 ¡Defiéndeme!10 Capítulo 10 Peor que el infierno11 Capítulo 11 Las Cosas Claras12 Capítulo 12 Comienza la acción13 Capítulo 13 ¡No lo puedo creer!14 Capítulo 14 Un pasado difícil15 Capítulo 15 Lo Inevitable16 Capítulo 16 No hay sitio para el amor17 Capítulo 17 Cuando todo se complica18 Capítulo 18 Así comienza todo19 Capítulo 19 Una nueva perspectiva20 Capítulo 20 En el camino correcto21 Capítulo 21 El momento de sincerarse22 Capítulo 22 La Trampa23 Capítulo 23 Ajuste de cuentas24 Capítulo 24 Frente a frente25 Capítulo 25 Todavía no termina26 Capítulo 26 Mentiras… sólo mentiras27 Capítulo 27 ¡Dime la verdad!28 Capítulo 28 Un bello sueño29 Capítulo 29 La cruda realidad30 Capítulo 30 Tenemos que casarnos31 Capítulo 31 Ni como evitarlo32 Capítulo 32 ¿Dónde estás, maldito 33 Capítulo 33 Princesa, no esclava34 Capítulo 34 Nunca se rindió35 Capítulo 35 Su verdadero yo36 Capítulo 36 Tenían que pagar37 Capítulo 37 Sin salida38 Capítulo 38 Un hada madrina39 Capítulo 39 Sin presiones en la prisión40 Capítulo 40 Una historia real41 Capítulo 41 ¡Estas caliente !42 Capítulo 42 Ajuste de cuentas43 Capítulo 43 Una deuda que no se paga44 Capítulo 44 La historia da una vuelta45 Capítulo 45 La entrevista46 Capítulo 46 Un nuevo peligro47 Capítulo 47 Mi amiga la China48 Capítulo 48 Los hechos hablan por sí solos49 Capítulo 49 Mi querida hermana50 Capítulo 50 La verdad de Estela51 Capítulo 51 La declaración de una muerta52 Capítulo 52 Una guerra no declarada53 Capítulo 53 Yo te cuido, amiga54 Capítulo 54 Una vuelta más a la tuerca55 Capítulo 55 La verdad más bien guardada56 Capítulo 56 ¡Sorpresa!57 Capítulo 57 La vida tiene que seguir58 Capítulo 58 Testigo inesperado59 Capítulo 59 La cruel realidad60 Capítulo 60 Se veía venir61 Capítulo 61 Una Chacalada62 Capítulo 62 El recuento de los daños63 Capítulo 63 La verdad no se puede ocultar64 Capítulo 64 No todo se terminó…65 Capítulo 65 Sin mucho que decir66 Capítulo 66 Todo por la pasión67 Capítulo 67 La familia lo es todo68 Capítulo 68 Las cosas se complican69 Capítulo 69 Lo que no se debe de hacer70 Capítulo 70 Mal y de malas71 Capítulo 71 En la cama y en la cárcel se conoce a los amigos72 Capítulo 72 Las cosas en su lugar73 Capítulo 73 La esperada negociación74 Capítulo 74 Sin miedo al éxito75 Capítulo 75 No hay mal que por bien no venga76 Capítulo 76 Un encuentro inesperado77 Capítulo 77 Cuida de mi hija y de mi…78 Capítulo 78 ¿Víctima o victimaria 79 Capítulo 79 La balanza de la justicia80 Capítulo 80 El delito no duerme81 Capítulo 81 Esto no puede estar pasando82 Capítulo 82 Las cosas como son83 Capítulo 83 Y ahí vamos...84 Capítulo 84 ¿Asesina despiadada 85 Capítulo 85 Todas son víctimas inocentes86 Capítulo 86 ¡Todo es una burda mentira!87 Capítulo 87 No es un juicio penal, es un juicio público88 Capítulo 88 Y más de lo mismo89 Capítulo 89 Absolución, no es inocencia90 Capítulo 90 Mientras se cumplen los términos91 Capítulo 91 Yo no lo maté92 Capítulo 92 No había de otra93 Capítulo 93 La vida fácil del placer94 Capítulo 94 La verdad, desnuda95 Capítulo 95 Hay que seguir adelante96 Capítulo 96 Sólo hay una persona97 Capítulo 97 Necesito tu ayuda98 Capítulo 98 Resolviendo el enigma99 Capítulo 99 Todos tienen secretos100 Capítulo 100 A nivel nacional, la amo