Siniestra atracción
duce en el gentÃo. Sarah camina hacia el mismo lugar,
o de piña –dice una voz grave, a
el jugo de piña –dice bromi
y observa su atuendo; s
gunta en tono casual tras t
quÃ, mejor –su sonrisa es picar
rastro de su bebida, puede notar algún brillo
ás; Sarah observa a un chico pelirrojo que intenta ll
enza a beberlo, se sentÃa tan sedienta, que se lo toma de un sorbo. S
rita de rojo –le sonrÃe, habÃa visto la aprec
uiña un ojo y se vuelve p
acia aquella voz, prof
aceitunada, ojos negros como la noche, cabello ondulado y negro, de nariz gr
–se apoya en la barra mientras le dedica una s
antes de darle un trago a su bebi
ios sin dejar de sonreÃrle, podÃa se
o –dice suave, sin ap
e insistir, asà que vine –dice sonriendo, aquella
ley –dice sintiendo como
e mira atento, mira como se lleva un
–dice de ma
conoces a Luc? –sonrÃe de una manera que
mi mejor amiga, que es Roger –d
tienes? –traga saliv
erde el interior de su
dos años –dice en
; Sarah se sonroja por lo repentino de su pregu
tuve en coma uno y el otro estuve en rehabilitación –vuelve a tomar de su vaso,
bien –le sonrÃe, no
itarle esa sonrisa. Sarah sacude la cabeza, no conocÃa al homb
er toma el vaso vacÃo
mà –el barman asiente y prepara con rapidez las bebidas, se l
–dice toma
ntinuaron habl