Desencadenada de un matrimonio tóxico
o de la conversación que acababa de tener. El rostro de la Dra. Ramos es
sable! Necesitamos comenzar el tratam
lana, desprovista de emoción-. Pero simplemente no
ación que podía ofrecer sin revelar la grotesca ver
unció e
Ava de la Fuente? Me r
i fachada cuidadosamente construida. Sabía que mi espos
ía como una broma cruel. La ironía era un puñetazo en el estómago. No tenía dinero. Ni acceso. Todo mi mundo financier
Era un recordatorio constante e inoportuno del control omnipresente de Donovan. Me deslicé en el lujoso asiento de cuero, el silen
a en la oficina. Quiere que
apretándose con cada kilómetro. La oficina
dos de los empleados zumbaban a mi alrededor. Sus ojos, usualmente desvia
uno, demasiado alto
otro, claramente con la intención de que yo l
, reemplazado por un modelo más nuevo y brillante. La humillación pública era un manto familiar, pe
una sonrisa triunfante en el rostro, estaba de pie a la cabeza de la larga mesa de caoba, rodeada por una docen
lculadores, se encon
on. Qué bueno
o la malicia subyacen
tiene algo
é los hombros, un intento desesperado por aferrarme a los últimos vestigios de mi orgullo. Pero fue fugaz. El ro
tálico del miedo llenando mi boca. Incliné l
rro-, yo... me disculpo. Por cualquier a
o, cada palabra una piedr
no vaciló, pero sus
u voz dulce como el veneno-. Esperaba un poco má
samente en el suelo pulido. El olor de su perfume caro,
o cruelmente? La rabia, caliente y volcánica, surgió a través de mí, amenazando con estallar. Quería gritar, atacar, exp
, ¿podrías explicar por qué tus acciones fueron tan angus
cuchillo, disfrutand
intentar sabotear mi carrera? ¿Po
eza de golpe,
dolor agudo y repentino me atra
nubló. La hab
ovan. Entró, sus ojos fijos en Jazmyne, una mirada de afecto indulgente en su ro
, Jazzy? -pregun
as lágrimas en mis ojos. Era un nuevo tipo de d
desaire. Había sido mi protector, mi roca. Ahora, era el arquitecto de mi tormento. El hombre que una vez me prometió el mundo ahora
un camino por su mejilla-. Yo solo... solo quiero que
ro teatral escapa
inal de mi espíritu. Me erguí, mi cuerpo temblan
nada más
idas en el aire, desafiantes,
luego se entrecerraron. Otra lágr
iega a disculparse de
bró, una actu
eció, sus ojos se convirtiero
ícil de lo que tiene que se
gruñido bajo
rra de acero a través de mi
l golpe, pero nunca llegó. En cambio, me agarró del brazo, sus dedos cl
va. Harás lo
a adelante, su a
sabía que tenía. Una ola de mareo, más fuerte esta vez, me invadió. Tropecé, mis rodillas se doblaron. La h
ltó un empleado desconcertado, not
destello de algo, quizás preocupación, antes de que su mirada s
cuperar el aliento-, yo... nece
apadas en mi garganta, d
, aprovechó el momento. Se agarró la
an débil. Toda esta situa
gil, perfectamente diseña
ó su atención en ella, su duro
ariño, ¿e
os, mirándome por e
s hecho, Ava. L
enosa, llena d
oficina. Fuera d
final y aplastante. Quería gritar, llorar, pero las lágrim
s siguiendo mi retirada. Mientras me alejaba, escuché el susurro triunfan
e está rot
eniendo las lágrimas que amenazaban con estallar. No l
eléfono vibró, una sacudida brusca en el sil
nico-. Es su madre. Su condición se ha desestabili
río y devastador que la crueldad de Donovan. Se me co