Demasiado tarde para el remordimiento del despiadado Don

amente sobre la mesa del comedor. En esa fra

, no dudó. No in

frágil" primer amor, Mía, para tirarla a

do metal se estrelló contra mis p

me sobre la alfombra color beige, Dante gritaba pidiendo un

carretera porque ella fingió una caída. Le regaló el antiguo rosario

pe final no

or una "pesadilla", ignoró las llamadas urgentes par

porque Dante estaba demasiado ocupado

se, esperando que yo estuviera allí, rogán

s de divorcio firma

ificado de defunción con

nota. No dej

l silencio que se merecía

ítu

vista de

tambaleó s

que coincidía con la agonía aguda y punz

uelo de mármol del vestíb

lo alto de la gran e

vacías. Su cuell

esonando con fuerza en el techo abovedado-.

tir

o mi brazo izquierdo ce

toso vibró a tra

húmedo y débil

tas de roble se

nt

oquin estaba impecable, un contraste crudo y cr

det

ecorrieron

v

manchando de carmesí el mármol blanco.

evantó l

ollozando, su pecho subiendo y bajand

se m

se movió

asando junto a mi cuerpo arrugado si

e su paso urgente enfr

ró al llega

ado. No se detuvo a compr

ños en sus brazos, protegiéndol

gimió Mía contra su pecho-.

cariciando su cabello-.

vantar l

e -su

o un graz

Sus ojos eran poz

que está salvando a tu pa

voz me paralizó

ujó -dije co

e más en su saco-. No te enojes con ella, Dant

do como un maes

uchaba c

fría como para congelar la sangre en mi cara-. Si tiene la f

brazos, acunándo

bajar las

tos lustrad

Paso

rellano

cima de mis piernas p

d

no fuera más que basura e

de seguridad que miraba horrorizado-.

eñalándome inútilmente-. La seño

Dante sin mirar atr

e cerraron de

lvió a inundar

ro de cristal se convirtió

impo

mara a ella. Era que

ente. La vieja obli

orrió hacia mí, cayend

a? ¿Pue

los

a cegador, pero el vací

ngrando en el suelo para consol

s estaba

era su

que aún no había des