icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

El primo, el ceo y mi hijo

Capítulo 4 Divorcio

Palabras:1227    |    Actualizado en: 01/12/2025

a con la que la sujetaba. La luz del amanecer en la ciudad desconocida se sentía fría. Cada paso

rma en que me había dicho que yo no le debía nada, me había desarmado más

s natal en Latinoamérica; el papeleo del matrimonio se había iniciado allí y la anulación debí

l. Usé la tarjeta de crédito que mis abuelos me habían dado para emergencias. Comprar un boleto transcontinental con pocas horas

siento de la ventanilla, sintiendo el vacío de la distancia. El aire frío de la c

r la intensa luz tropical. El vuelo era un calvario de horas, un exilio autoimp

nó." Esas palabras habían sido los cimientos de mi identidad. Cada esfuerzo por ser "buena", por complacer, por casarme co

eguridad; me había dado dolor. Pero ahora, esa quemadura era diferente. Ya no era solo el d

e una elección." Me había tratado como un ser humano completo, no como una carga o un objeto. En ese encuentro catártico, encontré una extraña form

y pegajoso me envolvió. Era el olor familiar de mi tierra, mezclado con el caos ruidoso de los taxistas gritando ofertas.

solidificó. Tenía que enfrentar a Andrés, firmar esos papeles y cerrar ese capítulo de mi

, en Puerto Madero -le

ndo cómo mi corazón intentaba salirse del pecho. Abrí la puerta de cristal del bufete,

lta, me saludó con una expresión de profesionali

staba él

aje de tres piezas. Al verme, se acercó, extendiendo

es lo preocupado que estaba, ni lo que te

he anterior ya no era un incendio; era un hiel

nunca me había atrevido a ser-. No te molestes en ensayar la disculpa. Ya

o, pillado por mi falt

ituación escalaba, se sentó a la me

con la anulación por mutuo acue

mirada era una mezcla de resentimiento y

as la razón a mi madre y a todos los que dicen

a vez, no funcionó. Pensé en Elias, en la forma en que me había mirado y me ha

l bolí

sa ahora es la que tiene el con

as líneas punteadas. Firmé con una caligrafía inusualmen

que finalmente, resopló y firm

fecto. El matrimonio queda anulado. Legal

de mentiras se había disuelto en un instant

do un último contacto. -Astrid,

a mirada gélida. -No es tu pr

chada rota. Al salir del edificio, la luz del so

ra la casa de mis abuelos, mi único refugio. Tenía q

arqué. No a Elias. No

en Buenos Aires. ¿Pue

jeta de Elias de mi cartera. La miré de nuevo: Richter Proj

ría, pero era una posibilidad. Por primera vez, tenía una

Obtenga su bonus en la App

Abrir
1 Capítulo 1 Boda2 Capítulo 2 Venganza3 Capítulo 3 Amanecer4 Capítulo 4 Divorcio5 Capítulo 5 Cinco Años Después6 Capítulo 6 Reencuentro7 Capítulo 7 Mano a Mano8 Capítulo 8 El Primo en el Comedor9 Capítulo 9 Sobrino-nieto10 Capítulo 10 Defensa11 Capítulo 11 El Dueño de la Emergencia12 Capítulo 12 La Confesión Íntima13 Capítulo 13 La Ecuación de la Carne14 Capítulo 14 El Tribunal de la Sangre15 Capítulo 15 La Jurisdicción de la Piel16 Capítulo 16 El Contrato del Café y la Sangre17 Capítulo 17 La Gravedad del Dueño18 Capítulo 18 El Silencio de la Fortaleza19 Capítulo 19 El Despertar del Rey y la Torre de Cristal20 Capítulo 20 Diamantes y Territorio21 Capítulo 21 La Gramática de los Celos22 Capítulo 22 Cimientos de Acero y Sangre Azul23 Capítulo 23 El Escaparate del Rey24 Capítulo 24 La Disciplina del Silencio25 Capítulo 25 El Segundo Cimiento26 Capítulo 26 El Vals de la Dinastía27 Capítulo 27 El Fantasma de Praga28 Capítulo 28 La Frecuencia del Control29 Capítulo 29 La Obra Maestra y el Cristal Roto30 Capítulo 30 El despertar de un mounstro31 Capítulo 31 El Silencio de la Maquinaria32 Capítulo 32 El Fantasma en la Máquina33 Capítulo 33 El Mensajero del Cielo34 Capítulo 34 La Tumba Vacía y el Primer Llanto35 Capítulo 35 El Murmullo en las Paredes36 Capítulo 36 Mi ceguera nos mantiene vivos. Tu paranoia nos está matando37 Capítulo 37 El Fantasma de la Cuna38 Capítulo 38 La Lógica del Verdugo39 Capítulo 39 La Madre en el Laberinto40 Capítulo 40 La Lógica de la Locura