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golpeó directamente a Wendy, la cual se puso t

esa familia la habían i

ago, no había ninguna relación entre ella y Andy Wang. Jamás se

aunque no conocía bien a Wendy. No pudo soportar

os tías que parecían complacidas mirando todo, luego, dijo: "¡Pueden insultarme a mí, pero a mi madre no! Les advierto que, de ahora en adelante, si alguien se atreve a insultarla una vez más, ja

speraban que ella pudiera ser capaz de actuar de esa manera

r en mes y medio. Si no puedes casarte con él, entonces no lo hagas, yo puedo encargarme del asunto con la familia Li. Sin embargo, tú deberás hacerte cargo del dinero para la matrícula de Wade. Además, nos

cerlo hoy. ¡Pero puedo apostar que al

encontraban sorprendidos, incluso su madre, pues nadie esperaba aquella reacción. W

char la situación y deshacerse de esas dos cargas. Y una vez que vio

s manos de su hija y la miró cuidadosamente, entonces, con m

de nada malo conmigo. ¡Créeme! Estoy muy bien". La c

as. En días normales, es fácil sobrevivir en ese lugar, no obstante, cuando llueva todo será un poco más difícil. Yo estoy bien teniendo una vida difícil, pero no quiero que t

un refugio para el viento y la lluvia, pero allí solo recibimos insultos. ¡Prefiero vivir en una mala condición que seguir escuchando sus burlas! Nece

Ejecutiva, ella tenía la firme creencia de que podía mejorar su vida. Basándose en

mudaron a la cabaña que se encontraba en la entrada del p

lado para colocar su leña, sin embargo, se encontraba muy lejos de la casa principal. No solo eso, el lugar estaba en muy malas condiciones, p

suponía que Celia y Wendy de

asi a punto de destruirse por completo, de hecho,

iempo de ir a hablar con la abuela", inquirió Wendy, quien miraba a

no debemos tolerar más humillaciones e insultos. Sé que estás triste, pero esto será solo temporal. ¡Encontra

u padre no hubiera muerto, no nos habrían expulsado de la casa.

tamos hombres que nos apoyen económicamente

dijo: "Siento que después de que caíste al agua cambiaste mucho. Jamás te atreviste a contr

a que la mujer no sabía que le había sucedido a ella, claramente podía ver que

e, al escuchar el tono de sospecha en la voz de su madre, tomó sus manos

e la chica. Luego, respiró profundamente, y habló: "Ahora que nos mudamos, debem

s decidieron limpiar primero para que n

exhaustas, por lo que decidieron cocinar un

iar su situación actual. O, de lo contrario, rápidamente morirían de hambre, ya que d

gunos problemas. Entonces, al ver los bambúes verdes y regordetes que se encontraban en la otra m

der evitar su emoción. Luego, sin perder tiempo, to

aste eso?", preguntó la mujer, ansiosa, mie

s bambúes y reg

lguna señal de su madre, Cel

re caminando con un saco lleno de comida en su espalda. Él no era otra

taba tram