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Bebé secreto del ALFA

Capítulo 4 Edith.

Palabras:1858    |    Actualizado en: 05/10/2025

otro

mente ella est

isfacción. Sus dedos habían danzado sobre el teclado durante horas, moviendo los hilos invisibles de su red de contactos. Cada llamada

de un informe médico, era como un ven

oba, sus nudillos poniéndose blancos por la fuerza. En un arrebato de furia ciega, lo empujó con todas sus fuerzas. El mueble macizo se

e pasar! ¡Él tenía que habers

a su alrededor. El escritorio volcado, los papeles esparcidos, los restos brillantes d

EN AGRADARLE A TODOS....¡¿Por

maquillaje corrido y su respiración fuerte, no sevía diferente de una

*

au

eces he ido ya

leto infierno debido a los mareos que llegan en los momentos más inopor

vé las manos cuidadosamente después de haberme enjuagado la boca, la cercanía de Ez

solamente mis ganas de vomitar cada cinco

mportante para que la teng

enir de la oficina de Ezra, m

te refier

anzo a identificar de espaldas, Ezra está sentado de espaldas a

o a escondidas, quise irme y no ser entrometida, pero él nunca me

lo inevitable? ¿Es por ella? Lauren no ha hecho más que estorbar desd

manos de la sorpresa, ¿Ello

do a llegar donde estoy. - Respondió Ezra. - Tus quejas no son m

taría hablando en privado

o ell

e tí? ¿Crees que por ser

silencio, un sile

ro ella jamás se aprovecharía de mí, Lauren no es solamente mi secretaria, es ta

primera vez en mi vida no supe qué hacer. Ahora mi secr

lloras? Siempre supis

intento disimular y secar mejor mis lágrimas, tratando de evitar las

aba ofreciendo el pañuelo. - ¿Por qué me miras con

ón espectral, acepto el pañuelo con desconfianza pero

edo responderte muchas de ellas. - Dice ella, con una sonris

ersonal y su voz de repente resuena con una autoridad que d

qué q

su lugar, aquellos que fingen no desear nada pero codician

o el

punto,

mis fuentes, como siempre, son impecables. Me preguntaba... ¿cómo

egundo, me sentí horrorizada pero Edith me miró con más intensidad, como si estuvier

Logro balbucear, mi cuerpo t

se rió de mí y se inclin

si pudieran ver a través de la ropa-. Un aroma inconfundible para alguien con mi... sensibilidad. Un aroma dulce, ligeramente punzante... el inconfundible susurro de un omega en las primeras

abía enter

n nudo en el estómago, ¿Cómo podía Edith siquiera sugerir algo como eso? No, s

sonrisa de victoria de ella... Jod

r que se arrastra a la cama de Ezra. - La sonrisa de Edith, una curva perfecta en sus

enor de mis preocupaciones en ese momento, la mera idea de que Edith, una omega cuya belle

eza en alto, no dejé de m

de escuchar tu misma que jamás t

sigue cuando intento alejarme de ella. - Pero los secretos siempre encuentran la manera de ser descubiertos, inclus

abía? Siento que mi estómago da un vuelco por los nervios aunque estoy intentando mostrarme lo menos nerv

ue soltó Edith

- siseó- Es un poco tonto que creas que él va a reconocer tu error y aceptar

ejó confundida (Más

puedo ayudarte a deshacerte de ese problema. - Ed

si... ¿Quisi

en tus palabras después de

ren. Ezra nunca te creería. ¿En verdad piensas que un alfa

firmación, ni sugirió la posibilidad

as para acusarme de esas t

intensidad fría. - Digamos que... unas personas vieron a Ezra

ché, si la verdad de esa noche era revela

a la secretaria de Ezra embarazada? La

in familia que te respalde, sin posesiones que te den segur

lmente consigue lo que

de mi futuro siendo madre sotlera y

sponde sola...» Me mordí el

tras,- supliqué -No quiero que sepas esto sobre

reputación de Ezra me importa tanto como a tí. No quiero que

o de empatía genuina. Para Edith, parecía ser una cuestión de

o podemos hacerlo,- dije, la u

no ahora eficiente y resolutivo. - Nos

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