icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Perdimos a nuestro bebé, encontramos su traición

Capítulo 4 

Palabras:975    |    Actualizado en: 26/09/2025

Torr

mesí que se extendía por la tela pálida de mi vestido. Mir

ué estás sangran

rpo se sentía como un peso muer

-jadeé, las palabras apen

amila desde un lado-. Probablemente s

ecepción cruzó e

voz plana. Ya había aceptado la exp

n mi abdomen, robándome el alien

azo, tratando de

asa, luego regresaré.

arme como un paquete y v

ios está pa

entrada de la galería, su rostro una mezcla de confusión y pr

luego se desviaron hacia la sangre. T

rodilló, su voz urgente-. ¿Llamaste a la doctora? Dijo que si el s

ardían con una furia qu

en reposo absoluto. ¡Está embara

ilencio. Se podría habe

a mí, su boca abriéndose

bra sonaba extraña en su lengua

suavemen

? -replicó, su voz goteando desprecio-. ¡Ahora ll

paredes blancas de la sala de urgencias, el gel frío en mi estómago

era sombrío cuando re

con una compasión que se sentía a un millón de kiló

nido de pura agonía fue arrancado de mi garganta. Las lágrimas llegaron entonces,

tor-. No, revise de nuevo. Llevamos cinco años intentándolo. Ci

Dante, su expre

a su esposa embarazada, que ya estaba experimentando

ran abofeteado, todo el color desapa

s llenos de un arrepentimie

nto mucho. Podemos... po

nquila a través de las lágrimas-.

pletamente d

nte. ¿Por qué no me dijis

a y rota escap

stro aniversario? ¿Cuando le comprabas joyas a otra mujer? ¿Cuan

corazón un abismo

ra demasiado bueno para nosotros. Dema

iera de acuerdo. Pensé que se sentiría aliviado de ser

í, en silencio y pálido.

a firmar nada. Llevamos cinco años cas

omo la tumba-. Ahora, por favor, vet

spital. Regresó veinte minutos después con una grasienta

lo primero que le conté sobre mí en nuestra primera cita.

la le gustaba su latt

za, rechazan

isa -suspiró, su pac

e que cada restaurante al que la llevas lo sepa. Llevas un EpiPen para ella en tu

do y vergonzoso. Murmuró algo sobre tra

rmo. Desenroscó la tapa, y el cálido y reconfort

to a tiempo para ver a Jael dándome c

cureció en un c

-

Obtenga su bonus en la App

Abrir