icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon

Abandonado a la Muerte, Encontrado por el Amor

Capítulo 4 

Palabras:1030    |    Actualizado en: Hoy, a las 22:20

eñador, las joyas caras, la vida que Mateo había construido a mi alrededor, todo carecía de sentido ahora. El penthouse en sí, una vez un símbolo de nuestro futuro com

a adoptiva, finalizando los detalles de mi traspaso a Césa

rincipal se abrió. Era Mateo, su rostro grabado con una

stás haciendo? -preguntó

oy, M

rosamente baja. Dio un paso adelante, agarr

-dije, arrancando mi male

su lado, pero me

o -dijo, su tono condescendiente-. Te dije

i voz plana-. Algunas cosas, una

tratando de enjaular a un pájaro que ya estaba volando. Las discusiones, las lágrimas, el ciclo de

esó el aire desde fuera de

voz de Sofía, agu

ver la calle de abajo. Un sedán negro venía a toda velocidad por la calle, desviá

Mateo fue insta

ó. No

o, saliendo por la puer

So

mino del coche en una heroica muestra de afecto. Caye

rza de su partida me hizo tropezar hacia adelante

oche, habiendo fallado su primer o

e metal negro y

explosión

con un chasquido repugnante. El mundo se fragmentó en un caleidoscopio de dolor y os

is oídos, pude escuchar l

sa, ¿estás bien

brazo estaba doblado en un ángulo antin

ré. Mi voz era u

lla como si estuviera hecha de cristal, su rostro una máscara de puro ter

dejándome rota y sangr

erder el conocimiento fue a Mateo levantando a Sofía en sus brazos, su rostro enter

lí, en el

hospital me saludó. Un dolor sordo y punzante irradiaba de mi ca

lla junto a mi cama. Parecía cansado

, una leve nota de

r mi mano, p

un brazo roto. Tienes suerte. Podría haber sido mucho p

nte un lago frío y

bodega de vinos. El vestido arruinado. Ahora esto. Cada vez, la elegía a

regunté, mi voz des

como si fuera lo más razonable del mundo-. Estaba en shock

desconcertado por mi silencio. Estaba acostumbrado a mis lágrimas, m

cortó el silencio. Miró la pant

so de

ta llamada. Es Sofí

ción, dándome la espalda, pero aún pod

res. Estoy aquí... Lo sé, fue aterrador... Po

ia mí, un destello de

irme. Sofía

irada fija en la

pelea, una discusi

ndonándome una vez más, una sola

s. Un problema que manejar más tarde. Per

Obtenga su bonus en la App

Abrir