Un Amor que Trascendió Dos Vidas
n me asaltaron: un accidente, un zumbido dis
rotegerme, me abofeteó si
que hiciste!" su g
la por un rasguño, mientras yo, la "falsa Sofía" , agonizaba
icardo, su guardaespaldas, me arrastró a una
as dar gracias de qu
iento ignorado por Ricardo para atender un
ua fui al pensar que podr
r un imperio, creí que éram
a herramienta, un boleto p
dáver, veo cómo Ricardo, con calculada frialdad, di
ndo, furioso, j
ta, y mi castigo ll
" , nuestro símbolo, ahora adorna
conciencia, esperando a que la verdad,
o hagas, te enfrentarás a una verdad gélida y des