La Venganza de una Dama
servaba un golpe más cruel. Mientras los observaba desde la oscuridad, vi a Mateo sacar una pequeña caja de te
ollar. Era un diseño único, una mariposa con a
do las piedras perfectas. Era un símbolo de mi propia transformación, de la superación de la enfermedad de mi madre y mi regreso
Como tú," me había di
er que había ocupado mi lugar, no solo en los papeles, sino en los detalles más íntim
la tortura final. Sentí que algo dentro de mí se rompía de forma irreparable. Arranqu
i reina, perdón por la tardanza. El cliente se complicó. Y
upación, era como veneno. No contesté. Apagué
leta. Empecé a empacar. Solo lo esencial. Ropa, mis documentos falsos, el dinero en efectivo que guardaba. Dejé to
ta cuando él llegó. Entró al cua
es? ¿A dónde vas
s en casa de mis padres. No me he sentid
y me tomó de las manos. "¿Por qué no me lo dijiste, mi
Solo necesito un poco de
Salió del cuarto y regresó a los pocos minutos con una bandeja. Había una copa de mi vino favorito y un plato
osotros," dijo,
Bebí un sorbo, el sabor amargo en mi boca. Él, en cambio, parecía genuinament
ra "irme" , él me detuvo en la sala. "Es
enfrente, había un escenario montado. Una banda estaba tocando nuestra canción. Y en el centro, una pantalla gigante proyec
mi cuello. "Quería que todo el mundo supier
una historia de amor que no existía. Me sentí como un animal en un zoológico, expu
rara, sus ojos brillando
un frío glacial. Él no me amaba. Él amaba la idea de tenerme, de poseerme, de
tí una soledad tan profunda que me ahogaba. El dolor era tan intenso que se transformó en una claridad a