Huida De La Falsa Sin Amor
edor de Sevilla, iba a ser mi es
suyo con el portátil me re
Personales" escondía un diari
sario que yo creí mágico, no era más que un cálc
imple peón en un juego cruel q
frío se instaló en mi pecho, y la dulzur
¿Cómo se atrevió a usarm
n inmenso vacío y una ra
su lugar en el inodoro, y mi hu