La prisionera quiere la Libertad
ínguez era el evento social
ola, sintiéndose
del salón, radiante, con Lore
cosas al oído, la presentaba
turo brillante," lo escuchó deci
hecho lo mismo por ella, intentando impulsarla, mostrándo
ó en un rincó
adearon y las pantallas gigantes que
nuevo, pero esta vez proy
ntimas, comprometedoras,
el salón. Luego, un
o pálida como
es un montaje!" gri
nzando dagas. "¡Fuiste tú! ¡Tú
ina, tan llena de veneno, q
s se volviero
a Lorena, la rodeó c
na máscara de f
su voz baja y amenazante. "
La impotencia. La certeza
, yo
él. "¡No quiero
intiendo el peso de toda
que pudo, la confusión y la an
sado, pero sabía que est
n, su corazón lat
do cuando la puert
s ojos eran dos c
u voz temblando de rabia contenida.
a. "¡No! ¡Álex, yo no hice
ozada por la humillación que le hiciste pasar.
brazo, su fuer
l. Y le vas a pedir
aré! ¡Soy
a bofetada que le h
do, pero más dol
n susurro helado. "O te juro, Isabe
ara. El tormento
ra de la casa,
era inútil. Él er
nía los ojos cerrados, pero Isa vio una leve sonrisa en sus labios
erdón," o
a desesperació
la caer de rodillas ju
ión, de rabia, de impote
susurró, l
jos, una mirada tr