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Mi querido doctor

Capítulo 8 El comienzo

Palabras:2263    |    Actualizado en: 01/10/2021

a, pude escuchar la puerta,

o estás? -pregunto

do que dijiste que dormiría al frente de tu cuarto, y no te quise molestar vi que

evitar que las lagrimas se me salieran, él se sentó a mi lado y puso su mano izquierda en mi espalda, acariciá

s que caían en silencio, sentí que me ahogaba, entre sollo

in nuestro seres queridos -Levante

ue le pasaba- a recordar los buenos momentos, con el tiempo ya no duele tanto, por eso es bueno que llores ahora, entre m

s penas con él, nos fuimos a dormir cada uno

que descansara, y así fue, durante esa semana me desahogue, me derrumbe por completo y luego me fortalecí, era un proceso que él decía que debía pasar, las primeras noches después del fun

el área de cardiología, en las tardes cuando llegaba yo pasaba el día encerrada no quería salir y el respeto mi espacio, hasta dos

ta ese día no había detallado el primer piso del pent-house

o, con espacios para revistas y libros, era de madera negra, el piso de todo el pent-house era de cerámica negra, al lado derecho de la sala se podía apreciar un comedor de 10 puestos, y atrás una cocina de concepto

oco grande supuse que era el despacho

mangas tres cuartos, el vestido me llegaba hasta 4 dedos arriba de la rodilla, era ceñido a mi cuerpo, y era de color rosa paste

ot

n la sala, quede impactado con su belleza, lue

a, voy a bañarme me cambio y

-Me dio una

rápidamente, luego de unos t

libro, me acerque despacio y la abr

sa ya estoy

mi mano, ella se acerco muy elegantemente y me dio su mano, salimos de la casa y nos pusimos en

a la rece

tenemos cita con

esperando. -Nos indico el despacho de Ro

s para tratar, primeramente, Sofia te voy a contar como era la situación de la empresa, ant

fi

nión, alguien llamo a la puerta, n

Rogers soy Jack Smit

vamos a comenzar, siga y tome asiento. -Dijo Rog

tar que sucede. -Dije un poco p

sa, ahí fue que ella hipoteco la casa, durante los dos años siguientes hasta el día que su salud empeoro, ella mantuvo a flote la empresa, y la casa, pero tristemente hace tres meses nos dimos cuenta que la empresa estaba en quiebra, ella lucho para mantenerla, hasta que e

empresa ya no es mía. -Pre

legal, y queremos que firmes los papeles, como te dije antes, yo no estoy pendiente de la empresa

tu poder, una de ella es que en un plazo máximo de un año te debes casar, y cuando cumplas un año

si, en cuan

n la debes hacer de perfil psicológico para ver el nivel moral y ético de cada empleado, y eso es todo. -Me extendió el testam

el despacho, fuimos a cenar al club. -Hablamos, por mucho ti

que despedir a más de la mitad de los empleados, ahora debía

ent-house, vi que estaba arreglado con flores,

estas en casa. -El

ría, prepare esto para ti quie

me dirigió hacia el comedor tomada de su mano, saco la silla del lado derecho de

luego charlamos c

hambre hoy fue un día pesad

viviendo, y siempre charlábamos hasta tarde, en ocasiones discutíamos como una pareja de recién casado, pero luego el me contentaba, con dulces, abrazos y tiernos besos

mi pareja, me gustas mucho y quiero intentar esto contigo, que te entregues a mí po

oportunidad contigo, es hora de ponerle titulo

sus manos comenzaron a recorrer mi cuerpo, yo lo abrace, sobre sus hombros, y enrede mis piernas alrededor de su cintura, de repente el me alzo, tan fácil como alzar un muñeco, subimos las escaleras mientras me besaba, llegamos al segundo piso y entramos al cuarto de él me acostó en su cama, y se alejo para observarme, tenia una mirada depredadora, llena de deseo, su barba era suave, sentirla me hacia estremec

a, no me tortures má

su camisa también, y pudo ver su hermoso pecho notablemente bien trabajado, y

¿estás lista? -Yo as

ancó el suyo, sus actos fueron tan fuertes, que

el brasier, comenzó a apretar mis grandes pechos y a lamer y chupar mis pechos con mucha fuerza, sus acciones hacían

húmeda, eso

so una almohada debajo de mis glúteos para que quedara más levantada, puso sus manos en mi cadera, y comenzó a embestirme fuertemente, primero eran embestidas pausadas pero fuerte, yo comencé a mojarme, como no lo había hecho antes y el me tomo más duro de las caderas y me dio la vuelta, el se acostó sobre mi espalda y sigu

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