Enamorada de mi Primo
a. Te he dicho que o
ras, aunque cuando hizo amago de abrir una de ellas, Daniel la bloqueó con seguro, sonriéndole y señalándole el asiento junto a él, así que no le quedó más remed
sonaba nerviosa y quebrada, aunque intentaba luci
ntaron cuando puso el seguro en las pu
también es una orden -dijo el chico
ene permitido... -Serena objetó, pe
nga permitido. Es mi madre y no va a mandar en có
más sobre las bolsas repletas de cosas domésticas y su mirada se elevó
sto...? -Ella pre
var la clavícula expuesta de Serena. Llevaba una blusa de tirantes que dej
se abrieron como platos y su respiración se entrecortó. Su primer pensamiento fue alejar su mano de l
de su rostro se implantó también en su cuello y en sus
rá almuerzo y la señora se preocupará. -Intentó decir con seguridad, mientras
de su voz, dejando la
cuando me veas, nena, nunca te haré algo que no
alabras, aunque el rubor de su rostro solo incrementaba más y más. Elevó
mucho. -Serena volvió a repetir, ya que lo que
tú dig
te sus últimas palabras, incapaz de procesarlas. Se metió por una calle conocida. El t
ras he estado afuera? -Dan
iraba hacia la carretera, esperan
as bromas de mi padre es que quiere que yo maneje su empresa -soltó una carcajada algo exagerada-. Y me envió a Boston a que vea eso, pero me la pasé bebiendo y
sus rodillas. Parecía que no entendía lo que decía, pero para él, el echo
qué a Daniel le parecía mal que sus padres quisieran heredarle su empresa. Muchas personas ten
malditas clases en el instituto ahora y espero que mi padre
él, su delicada frente estaba
y estarás desperdiciando mucho dinero. -¿Por qué
vez, elevando una
y siempre le deja millones al director del instituto y apa
o desperdiciado. Aun que se graduara, él saldr
le haga caso y me la pase j
su vista, pero el atractivo pl
Serena pareció estreme
a Reed pagó los gastos funerales, más una deuda que mi madre dejo. Ahora tengo que trabaja
ubiera hecho eso, aunque muy en el fondo si lo sabía. Como dijo antes, toda su f
Por mí, ella se puede ir al demo
mierda, preciosa. -Y con lo que
lgar nuevamente, colándose entre los demás autos con una habilidad increíble. Miró de
che dentro de la casa o se largó? -hizo otra
fue apenas terminé de lim
lo mientras mis
cendieron también y sus ojos br
supo por que dijo eso, pero al instante esa pregunta se q
rdía el labio con fuerza. No podía gustarle ta
e ande vagando por ahí. No solo hizo mierda mi ca
rada, aunque ahora mucho más calmada y cómoda. Daniel continuó con sus ojos puestos en ella; mordió mucho más su l
o empezaba a sa
modarte. Creo que podemos llevarnos muy bien ya que vamos a