Su novia pueblerina resultó ser legendaria
evarla a casa, s
a los elegantes hombre
ra asegurar que regrese", anunció con una sonrisa cálida un hombre que parecía ser mayordomo. "Además, la
. Fernanda dio un l
tenencias ya empacadas
de Zhota hasta Esaham fue largo
pequeño pueblo. El mayordomo encontró un motel mo
iso, era la número 201, probablemente la mejor disponible. El mayor
habitación resultaba inútil, así que Fernanda abrió la ventana para que entrar
, apagó las luces y se me
ero cuando se despertó sobresaltad
ta. Mientras se levantaba de golpe, una figur
ello mientras escuchaba un susurro am
quedó inmóvi
ombre, un terrible recordatorio de su peligrosidad. Esta inequívo
o se escuchó un fuerte golpe en la puerta. "¿Hay al
ello de Fernanda se
prácticamente muerta", sise
a mujer mientras su mano izquierda mant
eron que Fernanda se diera cuen
irle el juego
ra tranquilizarlo.
os intrusos utilizaron una llave maes
sobre su regazo y la rodeó con su brazo, obligándola a se
y un intenso rayo de una lin
pánico y se inclinó sobre
ner la audacia de entrar de esa forma?". Fingiendo estar at
ba molesta, pero seguía teniendo un
el hombre debajo d
razo, le dio la vuelta con destreza y
os se fusionaron con el ritmo constante de sus re
es en la puerta se quedaron rígidos, ya que no s
ostró señales de de
do. "Parece que están bastante ocu
junto a él y entró a la
do escuchó los pasos acercándose. ¿De verd
untiagudo en su piel que provocó un es
y, sintiendo coraje, Fernanda se incli
aso a la penetrante luz de la linterna,
anda se encontraron con los de él en un beso ferviente. Su cabello cayó en
apaban de sus labios hacían
os, interrumpiendo la tranquilidad. "¡J
la cama se levantó de un salt
ró, Fernanda se desenre
las cortinas, proyectando delicadas sombras a la habitación
aba su piel suave y aterciopelada. Esa mujer había agarrado sus br
a rozado su rostro con
una melodía relaja
lugar de sucumbir al pánico, presionó sus labios contra los de
cnica era un poco torpe. Solo presionó sus labios sin ha
habitual severidad se convirtió en un sus