Tan cerca, tan lejos
evo novi
pejo, arrugando la nariz mientras ajusta su blusa. Hoy es el dÃa de la boda de su
por segunda vez. Y aunque Mia quiere que su madre sea feliz, algo en toda esta situación no termina de cuajarle. Tal vez sea el hecho de que Ernesto, el futuro esposo de Raquel,
nrisa nerviosa y las manos temblorosas. Lleva un vestido que claramente e
romea, aunque el nudo en su estómago crece. No es que esté en contra de que su madre rehaga
nia, ¿s� Ernesto ya está lo suficientemente nervioso -Raquel le dice, con u
ometo nada -responde Mia
oce realmente. El caos reina, pero en ese tipo de caos que solo sucede en las bodas: confeti por todas partes, copas de champán vaciadas demasiado
a de su madre, ni siquiera habrÃa planchado. Su mejor amigo, Leo, lo arrastró al evento con la promesa de que habrÃa buena comida y quizás una que otra chica guapa. Rodrigo, por
lo convencÃa de asistir-. Además, mi prima está relaciona
ómo casi se queda dormido durante el sermón del cura. Se distrae mirando alrededor, pensando e
ir si comer otra porción de pastel o si huir antes de que alguien la atrape en medio de su autoindul
ca invitada sonriente y emocionada por la ocasión. Su
ensarlo dos veces, Rod
ndo si vale la pena? -pregunta, provocando q
si reÃrse o fruncir el ceño ante la pr
iendo sincera, creo que este tipo de pasteles
orma en que habla, que lo desarma por completo. Se esperaba a alguien más convencion
arriesgarnos. No serÃa la primera vez que me decepciona algo que pare
bromas sobre los clichés de las bodas y comentarios sarcásticos sobre las caras
a. Él parece tener una filosofÃa similar a la suya sobre el matrimonio: una especie de espectáculo teatral en el que
ecuenta bodas, -comenta Mia, alzando una
quÃ. Aunque, si soy sincero, la compañÃa ha superado las expectativa
nto: Raquel, la madre de Mia, aparece de repente con una
l, haciendo una pausa incómoda en la palabra "amigo", clar
lla es mi mamá, la novia -responde Mia rápidame
tre madre e hija es palpable, como si hubiera algo no dicho entre ell
tando de la boda -dice Raquel antes de excus
suspira. Rodrigo, notando su cambi
a él, ahora sin el to
a pausa, buscando las palabr
de conocerla, algo en ella le dice que Mia es
n cuenta de que, sin haberlo planeado, sus caminos se han cruzado de manera inesperada.
ste preciso momento. Lo que Rodrigo aún no sabe es que lo que comenzó como un
asado de sus respectivas familias guarda un secreto q