Tan cerca, tan lejos

lsillos. Lo último que esperaba en esta boda, y en la vid

levantado entre ellos-. Mi padre... bueno, apenas hablaba de su pasado. Todo lo q

as de su vida, que nunca encajaron del todo, hubieran encon

an pequeña que lo único que me quedó fue una imagen borrosa de él. Mi madre nunca quiso ha

emocional imposible de deshacer. Hay algo terriblemente cruel en el hecho de que, justo cu

sas, ¿no? -pregunta él, aunque

vitar soltar u

stración-. Estaba empezando a sentirme bien contigo. Es decir, me caías bien, Rodrigo.

ente ese mismo desconcierto. ¿Qué se supone que hagan con todo

Pero... no tenemos que decidir nada ahora. Tal vez solo.

ue siente en su interior. Pero debajo de todo eso, hay algo más. Un pequeño destell

guna manera,

e su corazón sigue latiendo con fuerza. Hay tantas emociones

drigo, y luego se interrumpe, como

irándolo con una mezcla

una locura, de alguna forma me alegra haberte co

caos, siente lo mismo. Conocer a Rodrigo ha sido una de las pocas cosas que, hasta ahora, le

esponde ella, con una sonr

un silencio lleno de entendimiento, como si, a pesar de todo lo que acaba de r

elebración a su alrededor. Los invitados están ocupados en sus conversaciones, brindis y bailes, pero

emociones de Ernesto, incluso cuando él intenta ocultarlas. Y es

ta Raquel, con la voz suave, colo

la sensación de inquietud que lo h

... me parece familiar, pero no logro entender por

ea una ceja

u pasado? -pregunta, intent

su pasado, especialmente de ciertas partes de él. Pero hay algo en esta sit

de, evasivo-. Puede que

resionarlo cuando se trata de su vida antes de conocerse. Pero esta vez, su

la mesa con una bandeja de copas de champagne. La pareja toma una

nesto. Mientras alza su copa, una idea comienza a forma

entado enterrar durante tantos años

a del salón. Ninguno de los dos parece tener la energía para volver al bu

Mia, medio en broma, medio en serio-. Digo

suavemente, aun

erso tiene un sentido del

admite Mia,

tanas pueden ver a los invitados brindando, bailando y celebrando,

a Rodrigo, aunque no

reguntas en su mente, tantas dudas y sentimientos mezclados, pero una cosa es cl

mos -respond