Un CEO Vengativo
una hilera de muchas puertas iguales, por lo que pudo aprec
ada lujoso o muy cómodo, solo
alquier modo- le aseguró- Así que.
el servicio, la cocinera, mi madre,
ñorita Brown, lo cual complicaría todo, y que de ser así tendría qu
ropero, nada más... no había exagerado al decir que era muy genérico. Cualquiera que lo conociera, no podría creer que estaba aceptando dormir en aquel lugar, cuando era dueño de grandes empresas y su habitación era más grande que todos esos cuartitos juntos, con una enorme
para mí.-le
iendo el ceño mientras cruzaba las manos sobre su pecho y mirándolo con un extraño brillo
libre- dijo
o se sirve a la una en punto. Sería conveniente que me busque un poco antes, así puedo presentarle al personal y mostrarle un rápi
cama... -Aquí estoy hermano- dijo a la nada- dispuesto a vengar tu nombre, la señorita Brown, debe pagar por lo que hizo- se sentó en la cama-
, caminó hacia el rancho, sin embargo era imposible no apreciar la hermosura del
una mujer madura, que lo
res?-dema
, la señorita Brown
te interesado -¡Otro salario, otra boca que alimentar, el rancho necesita liberar deudas, no adquirir más!- parecía frustrada, y Max contuvo una malvad
un lugar para vivir e inspirarme para escribir mi n
epa que aquí el trabajo es duro-lo recorrió con la mirada, como advirtiendo su apariencia citadina- Ya
aría como salvador, y si tenía la oportunidad le arrebataría a esa mujer su propiedad, ésta propiedad que trajo desgracia a los Bec
verigua
s después una joven le abrió la puerta y lo miró con evidente asombro,
empleado, estoy en busca
n nuevo integrante- dijo con v
uchó la voz de la mujer
que hoy solo me mostraria el lugar per
e es Maximiliano Neumann, y se quedará una temporada con nosotros. - la joven asintió con una sonrisa- sigame, Aquí es donde se reunen a la hora de la comida, desayuno a las siete en punto, pero puede venir antes por una taza de café- el asintió- el almuerzo se sirve a la una en punto y la cena a las seis treinta. Si por algun motivo ajeno a actividades
lo abs
regordeta y de rostro amable les sonrió- ella es Mery, nuestra cocinera, nos prepara unos banquetes deliciosos- Sav
, Max- le dijo
mujer- tu llámame Mery. Está grande y
aparento- respo
para servirt
bre es Kate. Richard, el capataz, también están Matías, Elías, y uno
dar, espero no me falle la
a vamos a las cuadras, ha
te, soy un excelente j
sonrió- soy la mejor amazonas del lugar
ba en aquel terreno enemigo, no importaba cuan hermosa era, ni las artimañas q