La Diosa Luna y su Compañero.
a sig
l cielo. Una araña que estaba en una cueva parecía mirar fijamente a la cama donde yacía
que los humanos fueran personas que sirvieran en el templo, como sumo sacerdote o suma sacerdotisa. ¿Podría haber p
e acuerdo con lo que la Diosa de la Luna había ordenado. Poco después, la araña había conseguido hacer una red, cubrie
mósfera de la cueva era silenciosa porque no había allí otros humanos que hicieran el menor ruido que pudiera oírse con claridad. En menos de dos minutos
, murmuró el hombre d
instantes después, el apuesto hombre pudo cambiar de posición y pasar de estar tumba
as clavadas en las paredes, como si alguien más hubiera habitado el lugar. La admiración desapareció. El hombre giró la cabeza ha
ía despertado. De hecho, el hombre ya estaba sentado en la cama. La araña siguió caminando rápidamente hacia el objetivo, como si quisiera ver más d
así, mi deber tan pronto como sea posible terminado. Sólo hay que esperar a que abandone este l
bidas que allí había, con gratitud. -Quienquiera que me haya ayudado, ha sido una bendición disfrazada para mí. Ahora sigo
s. -Acabo de darme cuenta de que no podía responder porque sólo las brujas, los chamanes, los sumos sacerdotes,
tamente. Tras completar esta acción, su mano derecha cogió la comida, que resultaron ser cuatro trozos de pan, que había sobre la mesa de madera.
e musculoso dejó de comer el pan, luego se tocó otra zona, concretamente la cabeza, pero no había dolor alguno. La mano derecha vol
mandíbula firme frunció el ceño, mirando la mano que estaba en la misma situación. El tipo parecía no c
que me haya curado en tan poco tiempo, no era una persona corriente. Si algún día lo encuentro, le expresaré mi grat
*
inutos
bía una criatura de ocho patas que observaba las acciones del hombre, a quien la Diosa de la
llama l
l humano de treinta y cinco años no oyó la voz de la araña, por lo que ésta no pudo hacer nada al respecto. Mientras tanto, el ho
ue aún tenía pegada al cuerpo. Sustituyó la ropa vieja que ya no le servía por ropa nueva. Cuando ter
itud a las personas que me han ayudado en la vida, e incluso han cubierto todas mis necesidades. Pero ahora el problema es
sintió feliz porque el macho mortal se percató de su presencia. Sin embargo, la situación n
a diosa de la luna lo salvara, ¡así que ahora está a salvo y no muere horriblemente! Es realmente molesto el acto
*