La favorita del profesor.
necesitaba para pagar la operación de su hermano, había decidido hacer de tripas corazón y dejar los sentimientos a un lado, debía comprometerse y ser responsable, siempre pensando en
e todo ese asunto, aún debía esperar que una pareja la eligiera para traer al mundo a su pequeño milagro, así que también existía la posibili
los que se había llenado de dudas pero sobre todo días en los que había viste a su hermano pelear contra la muerte, en los que había sentido
acerlo antes de tener tiempo de arrepentirse, escucho como el teléfono celular marcaba tono, repicando a su amiga y espero mientras se repetía una y otra vez que había tomado la decisión co
to, durmiendo plácidamente entre los brazos de su amado novio, envuelta en el calor de su cue
o, rebuscó a su alrededor aún sintiéndo los ojos cansados; no había despertado del todo y ni siquiera lograba encontrar su teléfono; cuando por fin lo encontró su corazón dio un vuel
miga, estaba preocupada, no era normal que Vanessa la llamara a tan
munico y su amiga pudo respirar finalmente, no era lo que había pensado, pero era algo igual de importante. Todo el sueño qu
r haber tomado esa decisión, se libero de los brazos de su novi
usa de la sorpresa, sintió como su novio, entre dormido y desp
ola por la cintura, deseando volver a tener a su adorable n
ormir... - lo mimo hasta ver qué el muchacho volvía a caer en un suelo profundo, con cuidado se puso de pie y con paso delicado salió de la habit
ían hacerlo de inmediato antes de que su amiga se terminará por arrepentir, a lo largo de los años había visto má
erlo... - Samanta esbozo una ligera sonrisa, ¡Conocía tan bien a Vanessa! E
- pregunto a modo de broma, quería ali
lo - sabía que no tenía muchas esperanzas para poder conseguir el dinero que necesitaban para la operación de Gael, así que si se le present
dumbre comenzaba a invadir su corazón, era increíble el sacrificio que Vanessa estaba dispuesta a hacer por su hermano, por darle una oportunidad d
equeño milagro que tanto desean y podré salvar a Gael... yo puedo hacerlo, no creare lazos emocionales... yo pu
la apoyaría sin dudarlo y estaría allí para ella en todo momento,
iato - ¿Estás completamente segura? - fue lo primero que pregunto Samanta al ver a su amiga en la pantalla, no podía negar que estaba nervioso al i
tía sus ojos arder y un nuevo nudo formarse en su garganta, mientras se preguntaba ¿Qué será ella sin su hermano?, ¿Cómo
r su imagen intimidante para cuidar de esa pequeña niña pálidas y frágil que ella era, él se encargo de cuidarla, de protegerla, dentro y fuera del orfanato... él pudo dejarla cuando huyó del orfanato
iera con ella en ese momento, después de Gael; esa rubia de ojos verdes era su apoyo, su mejor amiga, su c
o, miles de preguntas rondaban si mente, ¿Podría con su embarazo?, ¿Todo saldría bien? Pero no tenia más tiempo para seguir pensando, cada segundo q
de anhelar conservar ese milagro pero debía convencerse de poder, de no amar, no debía permitir que el deseo de tener al bebé co
ombre que amaba; después de haber unido su vida a él, de haberse casado y de haber comenzado la aventura de formar un hogar, un jugar
ciales, porque la vida de la persona que más amaba era la que estaba en riesgo y jamás se perdonaría el perderlo por no atreverse a hacer un sacrificio como ser madre d
undo al fruto de su amor. ¡No!, En cambio una vida se estaba convirtiendo en una transacción, porque quisiera o no eso sería, daría
mismo mientras abrazaba a su tierno peluche de felpa, aquel conejito que había sido testigo de sus lágrimas, de sus enamoramientos;
iré que fue un descuido y ya... nadie tiene que saber que pasará con el bebé o quien es el padre - aseguro Vanessa
da que aquel gesto le provocó, ella sabía muy bien que Samanta era más que capaz de hacerlo - bien hablando de temas más serios... te comparto la aplicación más sería q
lquier cosa - señaló Vanessa, recordando algunos puntos clave que había leído en internet para
... Incluso para ocultar un cadáver - bromeó, ambas rieron observandose
e ambas habían reprobado la materia de dicho profesor, ya una vez; por lo que ambas debían cu
Blight - señaló Samanta
ente indiferente pero no era cierto, lo amaba en secretos desde la primera vez que se perdió en la profundidad de la mi
!... Benditos genes los de esa familia - si, su novio, era nada más y nada menos que el primo del profesor Christopher Blight; era un sexy abogado de ojos claros c
orque el profesor Blight está am
se encogió de hombros, a veces le costaba entender porque el distanciamiento de su novio con su familia p
a evitar tener cierto rencor contra el profesor, ya que por su culpa había p
o dejar tantos corazones en el aire - se burló la rubia de
tema pero en el fondo sabía que su amiga tenía razón, estaba enam
nos mirara con superioridad y probablemente nos repruebe la materia por segunda vez... - dijo apresurada Va
, imitando una de las tantas frases del profesor además de su forma de hablar tan pedante, cómo si fuera superior a todo e
respuesta Samanta, ocasionando que Vanessa pusieras los ojos en blanco, ese era solo uno de los
aje mientras fijaba su mirada en su computadora destartalada - Le doy a continuar ¿Cierto? - cambio de tema c
primero debía colgar el anuncio en la página, colocar su información y as
explicándole donde debía llenar cada cosa - no coloques tu nom
en su vida. Gozo de buena salud, soy de piel clara, cabello castaño rojizo y ojos ámbar. Mido 1.68 de altura, peso 55 kilos. Confiable, de bue
cierta madurez - sugirió Samanta, Vanessa asintió con un leve m
y de piel clara, cabello castaño rojizo y ojos ámbar. Mido 1.68 de altura, peso 55 kilos. Confiable, de buenos valores. Si está interesado contactarme al priva
y difícil, en su mente rogo porque todo saliera bien, porque Gael resistiera el tiempo suficiente para ellas pod
ada pronto para así obtener el dinero para la operación de su hermano pero por otro lado, sentía q
fesor Blight, con nuestra quería adoración y tu no has dormido absolutamente nada, Vanessa - sabía que recién a
anco mientras se preparaba emocionalmente para todos los comentarios hirientes que recibiría
ambas cortaron la comunicación y apagaron sus respe
cama, cubriendose con las sábanas, dejo escapar un suspiro preguntandose ¿Por qué la vida tenía que ser tan difícil?,
n que pensar, en su vida, en su hermano, en sus múltiples trabajos... en su futuro bebé... incluso pensó en el profesor Blight, ese que sin derecho algún le
corta edad sus problemas no la dejaban conciliar el sueño?... Sentía que cargaba con tantas cosas acuesta, que tenía el pes
había conseguido a un hombre que la amaba con locura, que tenía un trabajo estable, prometedor y que contaba con muchos ceros en
que tenía, lidiar con sus múltiples trabajos y sus estudios... estaba acostumbrada a e
de su celular sonó y ella no había logrado dormir ni siquiera un poco. Respiro profundo por enésima vez. Apagó la alarma y co
er dibujar una gran sonrisa sobre sus labios y mirar el nuevo día con ilusión, porque era una nueva oportunidad de vivir, de luchar, de levantarse y de demostrarle al mundo de que ell
espuesta a su anuncio pero no había nada, respiro profund
nte le hacía mantener
po... o al men
sonrisa, de esas radiantes que podían derretir el corazón de cualquiera... bueno, no de cualquiera, había un