El pecado de la santa.
favor, ya... no p
no se te olvide. - respondió el joven mientras de
o del acto sexual, a este joven se le daba muy bien perder la paciencia, y no poseÃa respeto alguno por las mujeres, ninguna de sus novias duraba más de un mes con él, Alondra la rubia que ahora gritaba de placer y dolor por igual medida debajo
jo el joven mientras camina
... - la rubia comenzó a vestirse apres
a, es más, no tienes permitido s
a las demás. - en tiempo récord Simón atravesó la habitació
una puta más como las otras y
ientras su labio sangraba, no era la primera vez
odÃa creer lo que Alejandra querÃa hacer, para él era al
isiva, alentando las locuras de cada uno de tus hijos. - Alessandro rara vez se enojaba con su esposa,
do en este despacho, ¡viviendo entre las sombras! - EstefanÃa era muy consiente que su padre habÃa matado a Fabiola, su ver
y solo entonces entenderás lo que es esta
reflejaba enfado y aunque la morena sabÃa que ella podÃa defenderse más que bien sola, no dejarÃa na
e feto fuera de su cuerpo para poder dar con los responsables!... - Santoro estaba segado por la ira, en ese momento no recordó todo y cada uno de los conse
a causante de que el mundo del mafioso se detuviera en un segundo, dejándolo sin habla. Mientras Alejandra quien estaba del
dro cuándo pudo reaccionar tomando su mano an
l cuerpo de tu hija, NUESTRA HIJA, la cual te recuerdo que fue concebida porque tú me violaste, y por la cual estuve dispuesta a hacer todo para protegerla. - La mano de Santoro libero el brazo de Victoria como si estuviera tocando fuego, jamá
achaba la cabeza con vergüenza por lo que hizo en el pasado, contra su espos
como ella lo elegirá sobre nosotros, si la obligas, yo... elijo a mis hijos sobre ti o sobre el mismo mundo si es necesario, adiós, Al
la rubia diera un paso Santoro ya la tenÃa envuelta entre sus
el dÃa que te presentaste. - respondió con voz tembloro
ré un buen padre, solo... no soporto ver a nuestros hijos sufrir. - explico aun agitado ante la idea de poder perder a su espos
nernos a su lado y asegurarles que sea lo que sea que suceda en su vida podrán contar con nosot
spués para enfrentar a su padre por su falta, por ahora dejaron a sus padres limar asperezas, sabÃan que mientras más fuerte fuera la discusión más tiempo seria el que se encerrarÃan en su alcoba o bajarÃ
vida ahora, no habÃan hablado mucho, la joven solo se habÃa encerrado en su antigua habitación, o eso creÃan, esta
r los viñedos, esos que la habÃan visto crecer y se planteaba casi
ra m� ¿Seré la responsable de que el matrimonio de
dero chequeo, saber de cuánto tiempo estaba embarazada, todo en su vida se habÃa torcido, pero de algo estaba se
n voz alta una vez más, hablando con
mpió en el viñedo y la hizo girar, para encontrarse con un joven alto de cabello colo
velo contra su padre y fue desterrado. - respondi
nÃa una estatura media, un rostro hermoso no podÃa negarlo, su cabello estaba corto demasiado para su gusto, era un corte casi varonil, llevaba un
ra curiosidad, sus ojos de color negro y motas verdes
años que solo veÃa a su hermano los domingos y apenas por una hora
el rostro de la joven se la hacÃa conocido, pero no recordaba de dónde, mientras dio una v
entó y el joven retrocedió dos
eà capas de bromear con tu hermana. - Alejandra no entendÃa que sucedÃ
itió con calma, mientras pensaba que el nombre del j
e 4 años. - Alejandra sintió que las piernas le temblaban, estuvo a punto de caer de no ser
elegido el camino a servir al prójimo, sabÃa que renunciarÃa a su familia, pero
no era una persona servicial, pero la joven entre su
or de que su hermano menor dijera que ella estaba murta se vio sustituido por una pequeña incomodida
yuda que jamás llegara, te llevare a la casa, no sé quién eres, pero si estas en esta finca es porque conoces a los Santoro. - Alejandra no entendÃa el enfado del joven, pero no pudo decir nada
ita? - EstefanÃa estaba a punto de s
u her
A te hizo algo? - preocupación pura era lo que salÃa de sus labios, la morena conocÃa a Simón, s
- Trato de sonar indiferente mientras el joven la coloco d
a crio con amor y cariño, pero esta mujer tenÃa más de su padre que de cualquiera a su alrededor y no tenÃa escrúpulos si de
ino por responder con el rostro aún más p
ndo lo hacia todos temblaban, después de todo ella tom
onado apareciendo de inmedia
iro enfadado, ¿Cómo era capaz de jugar con algo as� Se preguntaba a la vez que deseaba gol
hasta estar al lado de Ale, quien lo v
avorita, tu no gritas como está loca. - d
e era una santa. - Simón querÃa golpear a su amigo, si Estefa
un convento, era
n plan de enamorar a EstefanÃa, mientras ellos hablaban él se dedicó a recorrer el viñedo y fue allà que encontró a Giovanni, estaba solo llorando, gritándole a Dios porque le hacÃa esto, entonce
su decisión habÃa lastimado a su familia y también a ella misma, ya que fueron much
ordia actuó en mà para que regresara a cas
Simón también lo hacÃa, pero tratando d
mientras la futura esposa de su jefe salÃa de l
yer tomarÃa mis votos per
Por
- respondió sin
mayores explicaciones, en ese momento lo supo, recordó de donde conocÃ