Divorciada de un paralítico

aron del otro lad

señor ¿pue

mentó con voz

vuelta para poder marcharse. Sus pas

, se sintió feliz de po

había anochecido, la neblina poco a poco estaba cayendo. Esti

anco que quedaba enfrente de la empresa. Ya lista con su

sola. No pasaron ni 15 minutos cuando se sintió l

ículo de color azul, lar

untó Eduardo mientras había ordenado

straída, para n

que nos vayam

ría que camine a esta hora sola ¿Acas

ro yo creo que ese

te a tu casa, hazlo y yo me busco

siento

alle, Eduardo contempló como la joven se abrazaba

, finalmente ingresó a un edifici

te lug

Entonces ¿por qué

yo aquí esperando por ella, ni s

ora sí vamo

guida

tortura. Aún le costaba bastante trabajo tener que enfrentar

Le traje su c

s. Necesito que vayas al depósito

entó ella acelerando

l secreto, pero en cuanto entró a la empresa sabiendo que ella

ero de igual forma, no

a dicho desde el primer día. Al verse seguro dentro de su oficina, Eduardo m

asta quedarse apoyado

ones. Movió las ruedas para poder desplazarse, y se acercó al gr

nque le gustaba estar en esa alta silla, sintién

sea en

mente quedaba pa

taban los días nublados, segur

a podía recordar eso. Se mordió los labios, y

ió..! —p

que se perdió. No podía llegar a comprender, quién podr

tierra, y ese lugar ni siqui

arpetas, su rostro desapar

equeño cubículo,

de trabajo..? —pregun

e..! —le

e te ayude..? —

e, me ordenó que solamente

seo suerte, te

por el pasillo. Briana puso los ojos

ió dispersa de la misma

ir ahogada

o de pie, quería preguntarle acerca de algu

asiado e