Ese príncipe es una chica: La compañera esclava cautiva del malvado rey
Novia del Señor Millonario
Mi esposo millonario: Felices para siempre
El arrepentimiento de mi exesposo
Extraño, cásate con mi mamá
El dulce premio del caudillo
El réquiem de un corazón roto
Los Mellizos del CEO
Yo soy tuya y tú eres mío
El gran regreso de la heredera despechada
-¿Mamá falta mucho para llegar a casa de los abuelos?
-No, no Rafael no falta tanto llegaremos en una media hora hijo, toma puede ver una película mientras tanto.
Una madre junto a su hijo viajaban en su auto a ver a sus familiares al otro lado de la ciudad, los abuelos del niño vivían en el campo por lo que era el lugar perfecto para unas vacaciones, la mujer era madre soltera ya que el padre del niño la había abandonado cuando era joven, esta crio a su hijo sola y logro salir adelante por su propia cuenta, obteniendo muchos éxitos en su carrera y teniendo lo que siempre deseo para que así su hijo tuviera una vida con menos dificultades.
-Mamá la señal de la tableta está fallando, ¿será por la lluvia?
-Si hijo, trata de reiniciar la señal para ver si funciona, aunque con esta lluvia será difícil tomar señal desde el auto, llegando a casa de tus abuelos podrás jugar mejor.
La mujer miro por el espejo retrovisor a su hijo quien iba sentado el asiento trasero del auto, fue entonces de la nada un camión a gran velocidad se volcó impactando directamente con el coche de la mujer, esta hace maniobras inútilmente para mantener el auto sin tantos impactos pero la carga del camión se cae sobre el pavimento haciendo caer el coche por el barranco.
-Ugh…ahhh. ¿Qué? ¿Ra…Rafael hijo? ¿Hijo estas bien? Ugh.
-Los hemos encontrado, trae el equipo vamos a sacar a la conductora.
-¿Qué… Ugh quién? ¿Rafael amor…Hijo?
-¡Señora! ¡Señora ¿me escucha?!¡No cierre los ojos, mi equipo viene en camino la sacaremos del vehículo de inmediato pero no se mueva, trate de quedarse lo más quieta posible hasta que podamos sacarla! ¡Estamos al borde del barranco así que evite hacer muchos movimientos!
La mujer observo a un bombero mirarla por la ventana del vehículo mientras este abría cuidadosamente la puerta para sacar a la mujer del interior del auto.
-No…no por favor mi hijo, saquen a mi hijo primero.
-¿Hijo? Espere.
El bombero colgándose por unas cuerdas para mantenerse en pie y no caer por el barranco observo los asientos traseros del vehículo, quedándose completamente en silencio.
-Señora…
-Sa…sáquenlo a el primero por favor, mi hijo sáquenlo…ayúdenlo a él por favor, por favor.