Ya conocía a Liliana desde la universidad, ambas teníamos un sueño, ser mujeres exitosas, independientes profesionalmente y excelentes veterinarias. Pero en ese momento, no tenía idea de que Liliana era más que una
mujer, hasta que un día me reveló su secreto , solo para salvarme la vida.
Habíamos visitado el bar nocturno del pueblo, como solíamos hacer los viernes, pero esa noche, cuando salimos sobre la una de la madrugada, dos hombres nos esperaban en la penumbra. Sin ninguna noción de lo que estaba por venir, simplemente nos dirigimos hacia la universidad, pero en cuestión de segundos
fuimos atacados. Liliana había afinado sus instintos, lo que la ayudó a reaccionar y defenderse de inmediato, pero yo no tuve tanta suerte. Distraído como estaba por naturaleza y sin ningún tipo de entrenamiento de defensa personal, era un blanco fácil para ese depredador y rápidamente el bastardo me golpeó con un poderoso puñetazo, inmovilizándome y
arrastrándome a un callejón oscuro y sucio.
__ LILIANA.. - Trato de gritar su
nombre cuando noto que sus técnicas de defensa personal funcionaron bien contra
ese maldito que también la estaba atacando, pero pronto mi garganta se cierra
bloqueando mi voz. Con esfuerzo, giro mi rostro y aun a lo lejos, extrañamente noto sus ojos brillando intensamente en la oscuridad, fijándose en los míos y de inmediato suplico en voz baja. __ Por favor… Liliana…. ayúdame…- Mis lágrimas corren por mi rostro, mi cuerpo tiembla al sentir la fría y afilada hoja en mi cuello, además de las malditas manos
tocándome con malicia, que lamentablemente mostraban sus repugnantes intenciones.
Disgustada trato de soltarlo, golpeándolo con fiereza, cierro los ojos con el dolor instalándose en mi cuerpo en el momento en que la delgada hoja empieza a cortarme la piel, aun así no me rindo, esa maldita cosa no habría yo tan fácilmente. Pero en segundos se alivia el peso de mi cuerpo y el hombre que antes me amenazaba de muerte ahora yacía inerte, a mi lado, en un enorme charco de sangre. Liliana sabía que esas bestias humanas no eran oponentes fuertes, aun así no se reprimió, sus
golpes eran poderosos dejando al hombre frente a ella tambaleándose en segundos, pero cuando vio a su gran amiga tirada en el suelo con un idiota sobre ella amenazándola con un cuchillo, simplemente hizo lo correcto, liberando a su animal espiritual, mata a su oponente en segundos, haciendo lo mismo con el otro atacante cuando acude al rescate de Cassandra.
"Cassandra.. ¿estás bien?" Liliana inmediatamente intenta comunicarse mentalmente con su amiga, sin importarle que la vean como un lobo, enorme y feroz, pero
Cassandra solo la mira con horror, su sangre goteando por su cuello. " Por favor, dime... ¿él... te lastimó? “
__ ¿Liliana…?- Completamente aterrorizada miro a un enorme y peludo animal. Sus ojos amarillos me miran con preocupación y jadeo. __ ¿Eres… realmente… tú? - Realmente había
escuchado la voz de Liliana en mi mente, pero ¿cómo era eso posible? En silencio, me quedo ahí completamente conmocionado, no solo por el hecho de que veo a Liliana como un lobo enorme, sino también porque veo la sangre que gotea de la garganta arrancada de la maldita cosa que unos minutos más podría haberme
hecho. desencarnar de la peor manera posible de este mundo terrenal.
__ ¡Tenemos que ir! - Liliana aparece rápidamente en su forma humana, enfrentándose a Cassandra con un poco de aprensión. __ Pero... pero... incluso ahora... - Tartamudeé completamente incrédulo al ver a Liliana desnuda y completamente ensangrentado frente a mí. ¿Mi mente me estaba jugando una mala pasada?__ ¡Tú... tú eras un lobo!
__ Sí ... - Liliana se muerde el labio preocupada, ayudando rápidamente a Cassandra a levantarse. Recogiendo su ropa esparcida por el
suelo, se vistió rápidamente. __ Te lo explico más tarde. - Mirando a su alrededor comprueba si había algún curioso por ahí, si eso sucediera, le pondrían un chip. __ Ahora tenemos que salir de aquí.- Arrastrando a Cassandra fuera de ese
lugar, Liliana reflexiona si sería mejor llamarla Alfa, tenía prohibido revelarse a los humanos, era la única condición que su líder le había impuesto. ella dejándola estudiar allí en la Ciudad. Sacudiendo la cabeza, rápidamente
descartó esa idea, llevando a su amiga de inmediato al dormitorio, sumergiéndola bajo el agua fría de la ducha sin dudarlo.
__ Oh... Infierno.... - Grité, casi histérica, mirando
a Liliana con firmeza. __ Hace frío.
__ Lo siento...-Liliana suspira profundamente analizando la postura de Cassandra, su amiga la miraba intensamente ya que todo había pasado y no decía ni una palabra.__ Era la única forma de reaccionar...
__ ¡Liana! - Jadeé, sacudiendo la cabeza aún un poco incrédulo. __ ¿Eras un animal ?- Mirando su cuerpo esbelto y frágil, agrego suavemente. __ Eso es lo que vi... ¿no?
__Sí... - Liliana suspira frustrada, alisando su cabello dorado hacia atrás.__ Puedes estar horrorizada y hasta asustada...- Mirando a
Cassandra, se inquieta, mirándola fijamente. __ Pero tuve que matarlo...
__ ¿Es eso lo que te preocupa?- Jadeando de inmediato aparece en mi mente la imagen de ese hombre arrastrándome hacia el callejón,
así como el asco de su boca sobre la mía y el dolor en mi cuerpo. Mi mano se desliza con cuidado por mi cuello, la herida que me había infligido con la hoja afilada todavía estaba allí, latiendo, recordándome lo que podría haber
sucedido. Inmediatamente las lágrimas corren por mi rostro mezclándose sutilmente con el agua y aun mojadas, abrazo a Liliana, sollozando al darme cuenta de lo que le pudo haber pasado a mi cuerpo si ella no hubiera hecho lo que hizo. __ Me salvaste Liliana...- En ese momento ya no me controlé, lloré mucho y ella me dejó, devolviéndome un abrazo que en ese momento era lo que más necesitaba, muy fuerte y protector.__ Eso es todo lo que importa…a mi...
__ ¡Soy un hombre lobo! - finalmente habló Liliana, cautelosa, encarando Cassandra luego de darle el tiempo necesario para liberar su alma del susto que la había golpeado.
__ Entonces..- La miré con una mezcla de preocupación, escepticismo y luego curiosidad.__ ¿No es solo algo... de cuentos de ficción?
__ No...- Liliana suspira un poco temerosa de la reacción de su amiga al saber que ella era muy diferente. __ Realmente existimos.
__ ¿Cómo es posible que nunca me diera cuenta? - Declaro perplejo, analizando el rostro de Liliana en detalle, no había rastro de
cabello esponjoso en su rostro o cuerpo.__Duermo en la misma habitación desde
hace dos años, pasando mis días contigo.
__ Es un secreto bien guardado.- Liliana sonríe levemente al ver a Cassandra examinándose las orejas con curiosidad. __ Hago todo lo posible
por no exponerme. - Suspirando mira su celular. __ Si la manada se entera de que te lo dije, tendré que responder ante mi Alfa.
__ ¿Alfa? ¿Manada? - Me tapo la boca con la mano, perpleja.__ Liliana, sé lo que vi...- Me muerdo el labio, mirándola fijamente.__ Pero todo esto es irreal. ¿De verdad sois muchos?
__ Sí. - Liliana está más tranquila cuando ve que Cassandra se sienta a su lado.o en la cama .__ Soy descendiente de una larga generación
de hombres lobo. Somos tantos como humanos.
__ ¡¿En serio?!- Después de calmarme empiezo a tener más y más curiosidad._ ¿Solo se transforman en luna llena como en las películas?
__ ¡No! - Liliana sonríe divertida. __ La transformación llega cuando la queremos, y es muy difícil no poder transformarse para ir
corriendo al parque. Me siento atrapado e inquieto, pero no puedo, tenemos que permanecer escondidos. - Liliana estaba triste. __ Si veían un lobo solo en el parque, inmediatamente lo derribaban porque tenían miedo de los ataques.
__ ¿Es por eso que te vi tan ansiosa?- Me quedo pensativa, dándome cuenta poco a poco que a Liliana tampoco le resultó fácil ocultar su naturaleza animal.
__ Sí. - Suspirando, Liliana mira a su amiga con una sonrisa más feliz. _ Ya sabes la importancia de un veterinario en mi manada.
__ Claro que sí. - La miré estupefacto, tendría que lidiar con muchos animales de su raza.
__ ¿Cambiará algo entre nosotros?- Liliana toma las manos de Cassandra, mirándola con miedo.
__ Pero claro que no.- respondí de inmediato dándole un fuerte abrazo. __ Idiota, estoy