Ese príncipe es una chica: La compañera esclava cautiva del malvado rey
Destinada a mi gran cuñado
Ella se llevó la casa, el auto y mi corazón
Enamorarme de nuevo de mi esposa no deseada
Demasiado tarde para arrepentirse: La heredera genio brilla
Novia del Señor Millonario
Una esposa para mi hermano
Mi esposo millonario: Felices para siempre
La heredera fantasma: renacer en la sombra
No me dejes, mi pareja
Lo miro, y él me sostenía la mirada, lo veo remover su mano, pero un paso más, le vuelo las bolas. Ese hijo de puta bastardo. Potro ya era momento de llevarte, con quienes le has quitado la vida sin pensar que algún día pagarías. Cerdo podrido. Lo miro y le sonrió, él me devuelve esa misma sonrisa. No obstante, sin saber, que hoy es su último día de su podrida vida. No volverá a respirar después de hoy, claro que no lo podrá hacer.
_ ¡Señor, potro, ¿cómo le gustaría disfrutar la velada hoy, algo salvaje?, ¿Muy salvaje?!
_ ¡ja, ja, ja, Emilio sabe cuáles son las mujeres, que me gustan! Siempre me la envía bien informada. _
Claro, que tiene que saber, cuáles son tus gustos, es un cerdo igual que tú. Muchas chicas ni siquiera vuelven a ver a su familia, luego de pasar una noche con ustedes. A él le tocará seguidamente de ti. Así que no hay prisas. Pensé para mí misma
Yo le sonrió, como si no sé nada, solo se llama el señor potro. Pero no, ese es mi padrino. Un maldito traidor. Está involucrado en la masacre de mi familia. Y este hoy pagará por todo. Él no me reconoció, desde mi llegada, si me reconociera, me abría ya cabreado.
Solamente quiero descargar mi pistola en él, lo miro y su sonrisa desgarradora, y diabólica, me succionan la mente. Quiero contemplarlo muerto joder, no obstante tengo que hacer que muera una muerte horrible. ¿Qué tan horrible debería de ser con él? Sostengo el arma bajo la mesa. Apuntando a sus bolas. Ya me vale mierda, es momento de sentar con este tipo darle por lo que vine.
Disparó y dejo salir mi bala mágica, veo cómo él se espanta y aguarda su parte. Sonrió victoriosa, cuando observo la sangre correr por su pantalón. Sangre, el líquido que contemplo a menudo desde la masacre de mi familia. Él, un amigo íntimo y lo admiro en mí. En mi hermana, en mis guardaespaldas. No confió en nadie. Solo en mi Hermana Lia.
Observo como retuerce en el piso de dolor, ese dolor es tan diminuto como la humillación pública que sufrió madre. No creo que de verdad sufra dolor.
_ ¡Hija de puta, mierda! Me disparaste en las bolas?!
_ ¡Sí, y qué?!
_ ¡A la mierda, hija de la mierda! ¿Quién eres? ¿Quién te mando? ¿Sabes quién soy?
_ ¡Tú solamente eres una basura que no sirve ahora! ¿Dime cómo darás placer, si ya no te sirven las bolas?
Sonrió, como todo un demonio, ya me aburrí de él, quiero terminar de esto y ver a mi hermana, sentir su abrazo. Siento dolor. Han pasado tanto tiempo, pero el dolor nos se marcha.
Sus gritos atraen la atención de sus hombres, para eso ya estoy preparada. Intoxicación desde que tocan la puerta. Eso es mi debido regalo.
Batazr Belis, conocido como potro. Un árabe, ruso. Mi padrino, la persona que me enseñó a utilizar las palabras correcta. Cuando debería de vengarme de una persona. Sin embargo, nunca espere que la persona. Que me vengaría sería de él. Mi padrino. Y es momento de que pague ese cabrón.
_ ¡Batazr, alguien me dijo una vez! Que cuando llegara el momento de matar a mi enemigo debería mencionarle. «Lo lamento, no es mi culpa, tú solo elegiste estar en el lugar y la hora, el momento equivocado, y ofender a la persona equivocada.»
Termine de hablar, veo, como su cara de confusión, disimulando entender todo, pero el dolor le hace imposible ver con claridad. no puede ver, nada. Busca en su pensamiento quién soy. Y porque le expresé esas palabras. Piso, su pierna y observo como la sangre sale. Sonrió aún más al ver su cara con muecas de suplicación. Estoy consiguiendo lo que quiero. Pero yo quiero aún más. Quiero contemplar como grita y me suplica que no lo mate. Eso me excita más a matarlo lentamente.
_¡¿Cómo sabes, estas palabras?! Nada más se las mencioné a la hija, de marco. Como lo sabes tú… será … Será que tú…
_ ¡Sí…, sí… sí… esa soy yo! Hola, padrino como estás. ¿Cómo has estado todos estos años?
_ ¡Pero, ustedes están muertas!
_ ¡Exacto, en este caso, mi fantasma te está pidiendo retribución, por tu pecado tío, O no mejor padrino!
_ ¡Tú, como sobreviviste, estabas muerta, yo misma vi tu cuerpo!
_ ¡Haaaa, así que estuviste, en la revisión, ¿cierto padrino?! Ahora dime, porque crees que te dispare en las bolas.