Ese príncipe es una chica: La compañera esclava cautiva del malvado rey
Mi esposo millonario: Felices para siempre
Novia del Señor Millonario
El arrepentimiento de mi exesposo
Extraño, cásate con mi mamá
El réquiem de un corazón roto
El dulce premio del caudillo
No me dejes, mi pareja
Renacida: me casé con el enemigo de mi ex-marido
Los Mellizos del CEO
Una historia no puede empezar sin un comienzo cada año en mis vacaciones me encantaba ir de paseo ala finca de mis abuelitos cuando llegábamos mi hermano Javier y yo eran días emocionantes que mis abuelos nos recibieran con todo el amor del mundo sus sonrisas, sus caricias era lo más hermoso llegábamos a correr detrás de las gallinas ese aire fresco era una caricia para nuestras vidas mis padres se quedaban en la ciudad y ahí empezaba nuestra gran historia de esas bellas vacaciones nos volvíamos locos de emoción.