Login to ManoBook
icon 0
icon Recargar
rightIcon
icon Historia
rightIcon
icon Salir
rightIcon
icon Instalar APP
rightIcon
COMPRADA POR UN REY

COMPRADA POR UN REY

DARLLA VI

5.0
calificaciones
38.5K
Vistas
30
Capítulo

Comprada injustamente por un Rey cruel, malvado y muy bien dotado, Mila pasa a tener responsabilidades que nunca imaginó antes. Su coronación viene acompañada de numerosos desafíos, sobre todo cuando ella necesita hacer todo lo posible para resistir a su seguridad ordinaria y al mejor amigo del Rey, el tan codiciado Benjamin. Este no es un país con leyes comunes y fácilmente aceptables, especialmente por los terribles misterios que circulan por cada rincón de la región. Cosas macabras le suceden a nuestra Reina, que ve varios de sus sueños destrozados cuando su adorable esposo toma una actitud fatal. Como si eso ya no fuera suficiente, su corazón se divide en tres amores y tres misteriosas mujeres, que prueban todos sus límites.

Capítulo 1 - capítulo uno

Hace dos años Thomas Clifford el Rey de Dallnalia exigió a sus subordinados que encontraran una esposa para él. No cualquier esposa. Thomas era el tipo de hombre que vivía rodeado de aduladores y mujeres muy atractivas, él tenía todo y todos en la palma de su mano. Para el Rey el "matrimonio" era algo muy marcado, no se trataba de fidelidad, o amor, era sobre tener la más bella de todas, sólo para que pudiera exhibir su trofeo.

Después de dos largos años buscando a la más bella, su mayordomo James, aseguró haber encontrado a la mujer ideal para su Rey, él entonces quedó fascinado con la noticia.

Con una belleza incomparable y solo veintidós años, Mila Rivera fue la elegida del Rey. Sin muchas opciones ella aceptó el pedido. Sus padres felices con la boda de la segunda hija, aprovecharon para venderla por el precio más alto y, por supuesto, que nuestro Rey pagó por ella.

No existían ceremonias de bodas en Dallnalia y cuando fue elegida para ser reina la misma solo conocería a su esposo después de la coronación.

Luego con la corona en la cabeza, aquella linda chica de ojos verdes, cabello negro y un cuerpo gracioso, fue encaminada para su nueva casa, siendo ahora Mila Clifford la Reina de Dallnalia.

¡Dios mío...qué hermoso es! Digo con la mano pegada a la ventana trasera del coche, enamorándome de la vista cada vez más que nos acercábamos al palacio.

Ese día pasó de ser feliz a aburrido en pocos segundos.

¡Piter, reina mila! Una voz alegre hace eco desde el pasillo de al lado, haciéndome estar de pie inmediatamente. - Perdón por el retraso, es que terminé enredándome con algunas tareas...

Un niño un poco más alto que yo, de cabello castaño y hombros anchos, camina hacia mí con la sonrisa de oreja a oreja.

Piter- Soy Piter Bennet, su guardia principal!

"Seguridad?"

Sólo cuando se pone delante de mí creo que tengo un problema cardíaco.

Mila- ¡El placer es mío, señor Bennet! _tartamudea.

"Dios, qué sonrisa perfecta..."

Traje, zapatos, reloj en la muñeca y una carita de bebé.

Él no era el Rey, pero era un castigo para mi mente perversa.

Piter- Es... _él extrañamente me mira a los ojos, pone su mano en la nuca y balancea su cabeza con una risa sabrosa.

Mila- ¿Pasa algo? _Me pongo roja.

"Chicos, ¿cuál es la necesidad de ese cabello liso desordenado y esos músculos, estilo chico malo?"

Piter- ¡Nada! _respondió afligido. -Es que acabo de darme cuenta que perdí una buena apuesta...

"¿Qué?"

Cruzo los brazos esperando una explicación más plausible.

Piter- Yo y la gente hicimos una apuesta sobre la Reina escogida... _explicó todo tímido. -Confieso que te vendo ahora, yo definitivamente voy a perder un dinero!

Lo siento, pero no entiendo...

Piter- ¡Es que usted es muy linda! _disparó dejándome pasma con su coraje y lenguaje. -Y yo no esperaba que James fuera a salir tan bien con su misión!

Mis ojos están muy abiertos y mi corazón no ha saltado del pecho. Si me acerco a ese chico, mi matrimonio estará perdido antes de que empiece.

Piter- Lo siento, no quería hacerla sentir incómoda!

Era difícil saber si lo que me hacía sentir incómodo era el cumplido, o el hecho de imaginarte atando a mi cama con tu corbata.

Mila- Está bien... intento tranquilizarlo.

Yo ya sabía que estaría rodeada por algunos guardias, pero no imaginaba que el único encargado de acompañarme, tendría esa carita de adolescente malicioso.

Lo siento, ¿cuántos años tienes? Soy directa, ahogándome en mi curiosidad.

Piter- ¿Cuántos años crees que tengo?

Es muy juguetón, lo que hacía las cosas más difíciles para mí.

Mila- No sé... _pauso para pensar. -Tal vez dieciocho!

Se ríe de nuevo, dejando sus hoyuelos torturantes muestra.

Piter- Si tengo dieciocho, ¿se convertirá en un problema entre nosotros?

"¡Maldita sea!"

"Ayuda, que alguien me saque de aquí!"

Mila- No... _mi boca dice "no", pero mis pensamientos se preocupan.

Piter- ¡Estoy jugando contigo! _él es suave. -Tengo veinte! _respondió.

No sé por qué, pero algo me dice que no está mintiendo. Puede parecer que bebió de la fuente de la juventud, pero su voz, su mirada e incluso su manera de hablar, muestran cierta madurez y otras cosas que solo un hombre experimentado sabe hacer.

Mila- Bueno... cambio de tema. -Si es usted el responsable de acompañarme las veinticuatro horas, imagino que también puede llevarme hasta mi cuarto, ¿verdad?

"Mujer del cielo, ¿vas con ese guardia de seguridad a la habitación?"

Piter- Claro! _respondió. -Puedo llevarla donde quiera... _dijo mordiéndose el labio inferior.

"Jesús, que cosa tan..."

"¿Es algún tipo de gesto amistoso o una prueba de fidelidad?"

Piter- Venga... él gentilmente estira su mano para mí, esperando que yo la sostuviera.

Lo miro con total confianza, estiro mi mano lentamente hacia la suya y sostengo sus suaves dedos para apoyarme en su apoyo. Entonces me mira a los ojos con la misma voluntad, pero avergonzada escapo de una conexión muy profunda.

"¡Quería sentir más de su piel, pero el guante que cubre su palma obstaculiza nuestro contacto, haciéndome desear el resto de su cuerpo!"

Thomas- ¡ESPEREN! _berró.

Una voz fuerte y gruesa surge de detrás de nosotros, hasta que un aire frío recorre por toda mi espina, causando un escalofrío intenso en mi cuerpo. Aquel susto me hace errar el escalón, pisando en falso, sólo que Piter, es ligero agarrando mi cintura con una fuerza y voluntad inigualables.

Piter- MILA! _él se prendió a mí. -Estás bien? _preguntó todo preocupado.

Asustada, balanceo mi cabeza dos veces, asegurándome de que estaba bien. Entonces los pasos duros golpean contra la escalera, indicando que debería arreglar mi postura antes de que me castigaran.

Thomas- Lo siento mucho por asustarla! _dijo el hombre con cabello negro y barba perfectamente cortada. -Yo me encargo de aquí Piter, puede irse! Despidió a mi super héroe, entregando su cigarro a mi guardia de seguridad.

¡Mila- Rey Thomas! _el saludo, aún intentando recomponerme.

Thomas- ¿Te has hecho daño? Me preguntó y sin que pudiera evitarlo, sus manos rápidamente bajaron hasta mi tobillo, quitando mi tacón de aguja del pie.

"¡Dios!"

Mila-Majestad! _falo pasma. -N-no necesita agacharse!

"Gente, el Rey está arrodillado en el escalón, tocando mi pie!"

Thomas- Quédate quieta, necesito ver si no se fracturó!

"¡Qué vergüenza!"

¿Thomas- Aquí duele? _él ignora mi preocupación y continúa examinándome.

Mila- No, no duele, lo juro! _afirmo. -P-por favor, levántate... _pido cogiendo su brazo.

Se ajusta mi tacón y se levanta a unos pocos centímetros de mí, caminando por todo mi cuerpo con sus ojos mientras se elevaba.

Thomas- ¿Seguro que no lo hiciste?

El gesto fue de fusión, pero verlo personalmente y en esas circunstancias rompió todo el clima que yo planeaba para nuestro primer encuentro.

Mila- ¡Sí, lo sé!

Thomas- ¡No esperaba que nos conociéramos así, pero me alegro de que hayas llegado bien!

Y no esperaba que el equipo del Rey fuera tan bueno escondiendo ciertas partes de él en la televisión.

En las pantallas, era nítido un hombre de familia severa y postura fuerte. No tenía el collar de oro que lleva puesto, ni siquiera los primeros botones abiertos de su camisa social. Los tatuajes en su brazo, junto con su caro reloj, me llevaron al siguiente diseño que estaba encima de su pecho izquierdo.

La imagen de un Rey todo bruto y mimado, es sustituida por una figura un poco empolvada y con un gusto posesivo. Solo dejaba de ser un príncipe con caballo blanco, porque yo tenía certeza que debajo del cuerpo atractivo, también había una persona intimidante.

Mila- El viaje fue genial, ¡gracias por enviar a gente tan atenta y acogedora!

Thomas- ¿Vamos a conocer su habitación? _él pregunta, pero no espera por mi respuesta.

Thomas agarra mi mano y sale arrastrándome escaleras arriba, olvidando completamente el accidente de hace unos minutos. No puedo ver la decoración de abajo y acabo notando sólo dos pasillos arriba. El que está frente a la parte superior de la escalera, es el que me está guiando, donde había tres puertas a la derecha y tres puertas más a la izquierda. El otro rincón era más grande, pero no tenía que preocuparme, ya que podría conocer el resto después.

Al abrir la última puerta de mi lado izquierdo, saco el aire tratando de recuperar el aliento que perdí subiendo los escalones, pero cuando la madera se apoya en la pared, todo mi pecho se cierra de nuevo.

La habitación tenía una cama impresionante a la derecha y un balcón espectacular con vistas al jardín delantero. Era muy alto, pero había una pequeña rejilla de protección a la altura de la cintura. En el otro lado, hay un baño con balcones de mármol, una bañera y una ducha con box visible para quien entrara en la habitación. No tenía puerta, solo un portal que claramente fue construido solo con el objetivo de romper toda la privacidad que una persona debería tener. Ahora el armario, cero defectos, parecía haber sido construido de acuerdo con mis sueños.

¡Thomas- Este es nuestro cuarto! dijo, destrozando toda mi casa de Barbie.

¿Mila- Nuestra habitación? _debato. -Pero no deberíamos conocernos mejor antes? _pregunto con la piel ruborizada.

"Lo acabo de conocer, no hay forma de que compartamos la misma cama así de la nada."

"¿Y ese baño, si necesito usar el inodoro, será delante de él?"

Thomas- ¡No tenemos que conocernos! _zombou. -Eres sexy y pareces inteligente. ¡No hay nada de qué preocuparse! Él sonrió y salió de la habitación dejándome en shock. -ESTOY ESPERÁNDOTE EN EL BAR! _gritó afuera.

"¿QUÉ?"

"Está de broma, ¿verdad?"

Mi sentido nunca falla con hombres así.

Me di cuenta de que sería difícil enamorarme, sólo que no imaginaba que él iba a dificultar este proceso siendo un gran idiota.

Mila- "Eres sexy y pareces inteligente" ... _repito imitando su voz, con una mueca.

Entro en el box temblando de miedo, temerosa de que alguien pase por aquella puerta aunque yo haya cerrado. No podía ducharme aquí, mucho menos orinar sin un ataque al corazón. A la persona que construyó este baño seguro le gusta mostrar riqueza, ya que todo es demasiado elegante. Ahora, la forma en que está expuesto, indicaba una mente muy problemática.

Salgo del baño y me pongo un vestido de seda negra, no muy pegado al cuerpo. Él es de alciña y con un escote elegante en los senos, junto a una abertura sensual en la pierna. En mi cabello negro con ondulaciones hasta el centro de mi espalda, hago un moño rápido bien suelto, que deja algunos hilos levemente sueltos. Paso un gloss transparente que da un realzado en mis labios y por fin, termino con un delineado simple.

Lista y decidida a recomenzar, bajo las escaleras hacia el bar. Confieso que me pierdo por unos minutos, sin embargo una cocinera muy amable me muestra el camino.

Seguir leyendo

Otros libros de DARLLA VI

Ver más

Quizás también le guste

El Hijo Ilegítimo del CEO

El Hijo Ilegítimo del CEO

Celina González
5.0

Valentina, una mujer hermosa y exitosa, tiene un encuentro amoroso con un hombre misterioso en una noche de pasión y romance. Sin embargo, al amanecer, el hombre desaparece sin dejar rastro, y Valentina se queda con más preguntas que respuestas.  Un mes después, Valentina recibe la noticia que cambia su vida para siempre: está embarazada.  Sintiéndose avergonzada y confundida, Valentina decide viajar a otra ciudad para empezar de nuevo y evitar el escándalo. Años después, Valentina regresa a la capital para pasar las Navidades con su abuela. Mientras explora la ciudad, se encuentra con la boutique más famosa de la ciudad, propiedad de la esposa de un poderoso magnate.  Al entrar en la tienda, Valentina se sorprende al ver la reacción de la señora al ver a su hijo. Martina se queda atónita al ver el parecido entre el niño y su esposo, el magnate Gabriel. Furiosa y celosa, decide enfrentar a su esposo y exigirle una explicación. Gabriel, sin embargo, sigue declarándose inocente y fiel a su esposa.  Los hijos de la pareja, Benjamín y Jazmín, tratan de calmar la situación y pedir una explicación a su padre. Sin embargo, Gabriel sigue negando cualquier relación con Valentina o su hijo.  Mientras tanto, Valentina se siente confundida y asustada por la reacción de Martina. Aún así, continúa con su vida. Pero todo se complica cuando frente a ella aparece toda la familia Milano, reclamando y acusándola como la amante de Gabriel. Furiosa decide revelar el único recuerdo que tiene de aquel hombre con el cual se acostó y producto de eso nació su hermoso hijo, Valerio.  ¿Qué pasó realmente aquella noche? ¿Es Gabriel el padre de su hijo?  La verdad es más complicada de lo que parece, y Valentina deberá enfrentar sus miedos y dudas para descubrirla.

Capítulo
Leer ahora
Descargar libro