Sobrevivir es la palabra favorita de Cassie, una recién graduada de psicologÃa que ha pasado por muchas dificultades para sacar adelante su carrera y su vida en general. Con un esposo muerto que le ha dejado muchas deudas detrás de un pasado turbulento, necesita aceptar una propuesta extraña pero rentable para poder salir a flote y no ir a parar a la cárcel. Teniendo que buscar una alternativa acude a una entrevista para un extraño trabajo que ofrece un misterioso empresario y la sorpresa al verlo, es desgarradora. Para Thiago,cuyo nombre ahora es Marcos y quién no recuerda que alguna vez se llamó de esa otra forma, es un impacto fulminante al verla, y a pesar de su frÃa manera de ser, decide darle el peculiar trabajo, no sin antes intentar recordar de dónde le resulta tan familiar la chica y un tatuaje idéntico al suyo que ella lleva en una mano. Entiende que algo se esconde detrás de sus ojos y aunque lucha con todas sus fuerzas para recordarla, no lo consigue... no puede. Entonces decide conocerla. Ellos tienen una historia antigua que ella no olvida y él no recuerda... ¿Cómo se manejan los sentimientos en medio de tantos secretos? Conoce la historia de Marcos y Cassie, donde el amor es intenso, el dolor latente y la pasión arrebatadora.
Es una noche de lluvia. Una noche de esas en las que solo te apetece acurrucarte bajo el edredón, poner una pelÃcula romántica y lloriquear cuando los protagonistas se besan al final y suena una música dulce que indica que serán felices para siempre mientras comen las perdices que te encantarÃa comer a tÃ, si tuvieras a alguien que te hiciera sentir especial y única, como a la prota de la peli.
Pues no.
En mi noche no hay nada de eso.
Ni estoy bajo el edredón, ni hay peli, ni besos ni perdices. Simplemente estoy yo, esperando a que mi cliente llegue y se haga las putas fotos para poder irme a casa a dormir sola, sin nadie que me haga sentir absolutamente nada porque a nadie en mi vida.
Soy abogada, bastante famosa divorciando gente de mucho dinero y esto de hacer fotos lo hago para descompresionar del estrés que me genera mi trabajo.
Hace unos años me dedico a esto.
Tengo un estudio en un loft en las afueras de la ciudad y muy de vez en cuando tomo algún cliente para salirme de mi agotador dÃa a dÃa.
La fotografÃa es una válvula de escape perfecta pero resulta, que el maldito cliente se retrasa y me estoy estresando.
-¡Hola!
Siento que llaman a mi espalda mientras me estoy preparando un gin tónic porque la impaciencia me está devorando.
Me giro y le veo.
¡Joder!
El tÃo mide como mil metros de altura, tiene los ojos más verdes que alguna vez he visto y la sonrisa desgarradora más hermosa que alguien puede esbozar.
-¡Eh...!¡SÃ, adelante!
Ni siquiera le pregunto cómo ha entrado porque es evidente que me dejé la puerta abierta. Soy una insensata.
Se acerca a mà y me entrego a la belleza de este hombre.
Ofrezco una mano que toma presto y me sorprende dejando un beso en ella.
Llevo el pelo largo, negro y rozando sus hombros en bucles que le hacen ver salvaje.
-Perdona la tardanza -balbucea y me alejo un paso atrás -. Es que vine en moto y con esta lluvia, imposible apurarse.
-Tranquilo -consigo decir luego de carraspear y suelto la bebida de vuelta a la barra de mi bar -, entiendo.
¡Mentira! Lo único que entiendo es que está buenÃsimo y debe pensar que soy estúpida. No puedo dejar de mirarlo.
Me doy la vuelta y tropiezo con sus brazos que me aguantan por la cintura para que no caiga al suelo al tropezar con un cable de mis lámparas.
Tengo todo listo y solamente faltaba el cliente pero uf, el cliente está como un queso y cuesta concentrarse.
-Ups -murmura y sube un poco sus manos por las curvas de mi cuerpo hasta dejarlas a los lados de mis pechos, justo debajo de mis axilas y la sensación es inigualable -. Casi te caes.
-Lo siento -recupero la razón y me separo de él, pero me retiene.
-¿Seguro estás bien?
¡Pues no!
Estoy fatal, cachonda y haciendo el imbécil frente a un tÃo bueno que me de be estar catalogando como una lerda.
-Sà -miento descaradamente -.¿Empezamos?
Necesito hacer las fotos para poder irme a mi casa a darme una ducha congelada a ver si recupero la temperatura normal de mi cuerpo que ahora lucha contra la combustión espontánea.
-Vale -consiente dándonos un poco de espacio a los dos -. Voy a desnudarme.
¡SÃ!... Olvidé contarles que hago desnudos artÃsticos.
Se da la vuelta y con un pie presionando el talón del otro se saca loa zapatos y los calcetines detrás.
Yo acomodo mi cámara y Dios, que calor siento.
Me saco la chaqueta y me quedo solo con la camiseta blanca que llevaba debajo y los shorts a cuadros. Siempre trabajo sin zapatos.
Bebo nuevamente de mi vaso y entonces sucede...
-¿Puedo...?
Sus palabras son sucedidas por sus brazos a mi alrededor enjaulándome contra la barra y me quedo quieta.
Su aliento en mi cuello eriza mi vello y cierro los ojos cuando le siento completamente pegado a mi espalda y ni siquiera me preocupa que pueda ser un violador o un psicópata. A mà este tÃo que me haga lo que quiera. Nunca serÃa un castigo.
Cuando traga el contenido que quedaba en mi vaso, lo deja sobre la barra y yo yo sigo sin moverme.
-Delicioso -pronuncia con voz grave.
-¡Gracias!
Contesto y no tengo ni idea de por qué lo hago.
-¡MÃrame! -lanza su orden en mi oÃdo y me tiembla el abdómen.
No sé por qué este hombre me provoca tanto bochorno. Es muy intenso.
No muevo. Solo se mueven mis párpados que bajan para cerrar mis ojos y me siento reclamada. Nada más.
-¡Mi-ra-me!
¡Dios, que sensación me produce en todo el cuerpo la orden que me da!
Luego de ese momento, los dos sabemos que todo cambia y cada uno toma su rol nuevamente...
Sus manos toman el borde de mi camiseta y poco a poco la va levantando. Obedezco en todos los pasos y cuando la tiene cerca de salir, la deja contra mis muñecas y con su altura y lo cerca que está una de mis lámparas, amarra mis manos en alto y me permito dejarle hacer.
-Hasta que no obedezcas serás como una dádiva. ¡Muchas gracias!
Muerde el lóbulo de mi oreja y baja sus manos lentamente por mis brazos mientras me incita a abrir las piernas con uno de sus tobillos.
Llega a mis pezones y se detiene ahÃ, rodeando las aureolas con sus dedos indices y me dejo caer hacia abajo colgando completamente del agarre de mis muñecas.
Besa toda la extensión de mi cuello mientras gime bajito sobre mi piel y deja pequeñas mordidas en todos lados que visita y mi cuerpo entero se convierte en llamas.
Chupa mi nuca y los pechos son suyos para seguir amasando como guste.
Está desnudo, detrás de mÃ, caliente como yo y siento su prueba contra mis nalgas.
-Voy a follarte muy lento, Cassie, te va a encantar.
Aprieta mis pezones una última vez y pierdo la cabeza en un grito de placer que le regalo y le lleva a pasar su lengua sobre ellos, ambos de manera alternativa y le tengo delante magullando mi sexo con una mano hambrienta sobre el jean.
Estoy encadenada y ansiosa.
Cierro los ojos para no verlo porque sé que si lo hago, todo acabará. No quiero eso
Ya no.
Le siento soltar los botones que me mantienen vestida de cintura para abajo y es entonces que sé que no hay vuelta atrás.
En cuestión de nada, soy despojada de todo y quedo desnuda, con mis ojos cerrados.
-¡MÃrame! -repite y es su manera de confirmar que quiero esto.
Qué sensación tan extraña. Que delicia y que tortura.
Que mágico poder.
Niego y él sonrÃe sobre mis labios y aparto mi boca para que no me bese.
-Buena chica -dice dándose ppr permitido a entrar en mÃ.
Dos dedos se deslizan entre mi humedad y sabe, asà como yo, que estoy vulnerable y entregada a él.
Hace unos cÃrculos sobre mi clÃtoris y termina deslizando los mismos dedos dentro de mà y me retuerzo sobre mi posición.
Gimo y el gruñe sabiendo que quiero proseguir.
Escucho en medio de sus dedos creando música entre mis piernas con mis fluidos, el sonido del preservativos al rasgarse y su boca vuelve a mis pechos.
-¡Te amo, nena! -es un susurro muy bajito en mi oÃdo y luego me regala una mordida.
Intento no oÃr lo que dice y sigo conectando con su cuerpo simplemente tentando al mÃo.
Cuando estoy a punto, se retira y baja las manos a mis muslos, cuela sus dedos por detrás de ellos y me levanta cargando mi peso en sus palmas y me empala de una sola estocada.
-¡Joderrr!
Los dos decimos la misma palabra y mis ojos se mantienen cerrados. No puedo abrirlos. No quiero verlo. Sabe que no puedo hacerlo.
Se retira, quedando en la entrada de mà sexo y recuesta la frente sudada en mi hombro para tomarse el mismo minuto que necesito yo, porque sabe demasiado bien tenerle dentro y podrÃa explotar ahora mismo si se moviera. Sé y siento que él también.
Mis piernas se aprietan a su alrededor y entonces mi cuerpo le aprieta por dentro y grita empezando a moverse como demente dentro de mÃ.
Una, dos, tres y no puedo saber cuantas veces más, entra y sale, entra y sale y la velocidad es tan brutal que me falta nada para dejarme ir.
-Dios, amo esto. Eres maravillosa.
No digo más que jadeos. No puedo.
Siento como caen mis manos del techo y soy cargada completamente por él que me pone sobre el suelo, espera a que mis piernas se sostengan sin temblar y me da la vuelta, me dobla sobre una banqueta y poniendo mis manos en el borde de la barra de mi bar, me abre las nalgas con sus manos y vuelve a entrar en mà sin parar en el ritmo sobrehumano que impone.
-¡Ah, Cassie, joder!
Muerdo mis labios en cada empujón que me regala y la sensación de tenerle dentro resbalando por las paredes de mi vagina es una maravilla que nunca podré volver a sentir sino le tengo a él para dármela.
Suelta mis nalgas y le aprietan la polla cuando sube las manos a mis hombros, se aferra a ellos para profundizar en la penetración y cada empellón hace que mis pies se levanten del suelo.
Sé que ya tiene que acabar, no queda nada. El tiempo se agota y estoy segura que ya estamos al final.
Es entonces como siento, que me mete una mano entre las piernas y el muy maldito me aprieta solo un poco el botón latente y me corro como una novata al mismo tiempo que él. Los dos sabemos que yo no puedo hacerlo, pero también sabemos que él hace que sea imposible evitarlo. Y en el justo momento en el que dicen...
-¡Corten!¡ Ha valido!
Esa es nuestra señal para separarnos y Thiago se niega.
Cuando el director de la peli, el mismo con el que estoy casada se me acerca, mi compañero de reparto sigue dentro de mà en un intento de reclamo al que no tiene derecho alguno.
-Estuviste fantástica, nena -me besa los labios, incluso con Thiago dando un golpe dentro de mà con su polla y gimo en la boca de mi marido.
-Venga chicos. Tomen una ducha y en una hora grabamos la segunda toma.
Salgo de allà casi corriendo antes de que se de cuenta que me he corrido en pleno rodaje y cuando entro a las duchas, sé que está detrás de mÃ.
Me doy la vuelta, y Thiago dice con pesar y sabedor como yo, de lo que eso significa...
-¡MÃrame!
Y entonces sÃ, lo hago. Le miro. Le miro y me pierdo en esos ojos que tanto amo, en esa boca me consume en medio de la clandestinidad y dejo caer una lágrima al recordar que su hijo crece dentro de mà y no podemos estar juntos. Mi vida es complicada y la suya...la suya es todavÃa más difÃcil.
Asà que sÃ, como ya habÃa dicho, mi noche de lluvia no es normal como lo serÃa para cualquier persona, en mi caso, todo lo mencionado ha sido parte del guión de una peli porno. Salvo el hecho de que Thiago y yo, somos más que compañeros de reparto bajo los ojos de la pasión.
CapÃtulo 1 No.1
14/12/2022
CapÃtulo 2 No.2
14/12/2022
CapÃtulo 3 No.3
14/12/2022
CapÃtulo 4 No.4
14/12/2022
CapÃtulo 5 No.5
14/12/2022
CapÃtulo 6 No.6
14/12/2022
CapÃtulo 7 No.7
14/12/2022
CapÃtulo 8 No.8
14/12/2022
CapÃtulo 9 No.9
14/12/2022
CapÃtulo 10 No.10
14/12/2022
CapÃtulo 11 11
16/12/2022
CapÃtulo 12 12
17/12/2022
CapÃtulo 13 13
18/12/2022
CapÃtulo 14 14
18/12/2022
CapÃtulo 15 15
21/12/2022
CapÃtulo 16 16
21/12/2022
CapÃtulo 17 17
03/01/2023
CapÃtulo 18 18
04/01/2023
CapÃtulo 19 19
04/01/2023
CapÃtulo 20 20
15/01/2023
CapÃtulo 21 21
15/01/2023
CapÃtulo 22 22
16/01/2023
CapÃtulo 23 23
17/01/2023
CapÃtulo 24 24
25/01/2023
CapÃtulo 25 25
25/01/2023
CapÃtulo 26 26
01/02/2023
CapÃtulo 27 27
02/02/2023
CapÃtulo 28 28
03/02/2023
CapÃtulo 29 29
04/02/2023
CapÃtulo 30 30
05/02/2023
CapÃtulo 31 31
05/02/2023
CapÃtulo 32 32
06/02/2023
CapÃtulo 33 33
07/02/2023
CapÃtulo 34 34
09/02/2023
CapÃtulo 35 35
10/02/2023
CapÃtulo 36 36
11/02/2023
CapÃtulo 37 37
12/02/2023
CapÃtulo 38 38
13/02/2023
CapÃtulo 39 39
13/02/2023
CapÃtulo 40 40
14/02/2023
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