Esposa Traicionada, Madre Resurgida

Esposa Traicionada, Madre Resurgida

Gavin

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Capítulo

El grito de mi Mateo, mi pequeño, rompió la tarde y mi corazón. Corrí a su lado: una serpiente de coral se deslizaba, su veneno ya en la muñeca de mi hijo. Llamé a Carlos, mi esposo, pero solo obtuve su silencio, su buzón. El antídoto, nuestra única esperanza, estaba en casa del señor García, su mentor. Pero Carlos llegó con Isabella, la hija de García, su tobillo "mordido" , y la caja del antídoto vacía. "Solo había uno", dijo, y la entregó a ella, no a nuestro hijo. Mi mundo se desmoronó cuando el doctor pronunció esas palabras heladas: "Lo siento mucho, señora Romero. Hicimos todo lo posible." Mateo se había ido, y Carlos... él consolaba a Isabella, que sollozaba falsamente. Una semana después, la verdad me golpeó más fuerte que cualquier veneno: la serpiente de Isabella era "inofensiva", una falsa coral. Ella nunca necesitó el antídoto. Mi hijo murió por una mentira, por la ambición de Carlos de complacer a su jefe, a costa de la vida de nuestro propio hijo. Con el cochecito destrozado de Mateo en el suelo y sus palabras frías echándome de casa, me di cuenta: él nunca nos amó. Vagando por la ciudad, destrozada y sin un centavo, la desesperación me envolvió. Pero entonces, una voz inesperada me ofreció un camino: "Cásate conmigo. Yo te ayudaré a obtener justicia."

Introducción

El grito de mi Mateo, mi pequeño, rompió la tarde y mi corazón.

Corrí a su lado: una serpiente de coral se deslizaba, su veneno ya en la muñeca de mi hijo.

Llamé a Carlos, mi esposo, pero solo obtuve su silencio, su buzón.

El antídoto, nuestra única esperanza, estaba en casa del señor García, su mentor.

Pero Carlos llegó con Isabella, la hija de García, su tobillo "mordido" , y la caja del antídoto vacía.

"Solo había uno", dijo, y la entregó a ella, no a nuestro hijo.

Mi mundo se desmoronó cuando el doctor pronunció esas palabras heladas: "Lo siento mucho, señora Romero. Hicimos todo lo posible."

Mateo se había ido, y Carlos... él consolaba a Isabella, que sollozaba falsamente.

Una semana después, la verdad me golpeó más fuerte que cualquier veneno: la serpiente de Isabella era "inofensiva", una falsa coral.

Ella nunca necesitó el antídoto.

Mi hijo murió por una mentira, por la ambición de Carlos de complacer a su jefe, a costa de la vida de nuestro propio hijo.

Con el cochecito destrozado de Mateo en el suelo y sus palabras frías echándome de casa, me di cuenta: él nunca nos amó.

Vagando por la ciudad, destrozada y sin un centavo, la desesperación me envolvió.

Pero entonces, una voz inesperada me ofreció un camino: "Cásate conmigo. Yo te ayudaré a obtener justicia."

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Tentu, saya akan menambahkan POV (Point of View) ke setiap bab sesuai dengan permintaan Anda, tanpa mengubah format atau konten lainnya. Gabriela POV: Durante cinco años crié al hijo de mi esposo como si fuera mío, pero cuando su ex regresó, el niño me gritó que me odiaba y que prefería a su "tía Estrella". Leandro me dejó tirada y sangrando en un estacionamiento tras un accidente, solo para correr a consolar a su amante por un fingido dolor de cabeza. Entendí que mi tiempo había acabado, así que firmé la renuncia total a la custodia y desaparecí de sus vidas para siempre. Para salvar la imprenta de mi padre, acepté ser la esposa por contrato del magnate Leandro Angulo. Fui su sombra, la madre sustituta perfecta para Yeray y la esposa invisible que mantenía su mansión en orden. Pero bastó que Estrella, la actriz que lo abandonó años atrás, chasqueara los dedos para que ellos me borraran del mapa. Me humillaron en público, me despreciaron en mi propia casa y me hicieron sentir que mis cinco años de amor no valían nada. Incluso cuando Estrella me empujó por las escaleras, Leandro solo tuvo ojos para ella. Harta de ser el sacrificio, les dejé los papeles firmados y me marché sin mirar atrás. Años después, cuando me convertí en una autora famosa y feliz, Leandro vino a suplicar perdón de rodillas. Fue entonces cuando descubrió la verdad que lo destrozaría: nuestro matrimonio nunca fue legal y yo ya no le pertenecía.

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