La Mujer Olvidada del CEO

je ni ninguna llamada, era el fin de su relación, ya había pasado el tiempo suficiente para que él

ice solo pudo seguir llor

cayó inconsciente en algún momento de la madrugada y fue lo mejor,

lice al atender una llamada, aún estab

untar, seguía somnolienta y p

momento Alice terminó de abrir los ojos completamente.— ¿Estás bien?—

preguntó Alice, en ese momento se dio cuenta que algo no es

co? ¿Ayer no era su aniversario

.— respondió Alice alicaída, volvía a sentir mucha tris

Alice al escuchar esto sintió cómo si alguien le hubiera atravesado un puñal en el pecho, al mismo

ió eso? ¿Dónde

e lo que ocurrió, solo sé que está internado en la clínic

erando que él fuese a buscarla y ahora estaba internado luchando entre la vida y la muerte. No sabía lo que hacía, caminaba de un lado a otro buscando c

eguntó Roxana luego de uno

Francesco primero.— Roxana había entendido la situación y si

lanzó al pavimento, parecía ser experta en hacer

de espera de emergencias, al entrar Alice la madre de Francesco

Luke, uno de los hermanos de Francesco y el único de la f

cuidados intensivos, te fue a dejar a tu horrible casa y de regreso sufrió un accidente. Tú debiste estar e

o tengo la cu

e que algún día lo conociste.— sentenció Marlen

a culpable de lo que le ocurrió a Francesco, pero s

turo bebé.— estas palabras paralizaron a la madre de Francesco por completo, ella era mal

de Marlene para tratar de alejar

as de decir

o perder el equilibrio.— ¿Crees que te creeré que estás embarazada de

hombre con el que he tenido relaciones en mi vida y no nece

ión.— intervino Roxana tomándola del brazo, Alice siempre era muy calmada

e quiero volver a ver por acá ni en

ría nunca y ahora tenía otro motivo para odiar de su relación. Para Alice esto no era importante en estos moment

silencio Roxana cuando llegaron al auto y Alice solo asintió, Roxana era una de las personas que mejor la conocía y entendió de

ue si el accidente había sido cerca de su casa eso sign

ra lo que empezaba a atormentarla y sus lagrimas empeza

xana cuando entraron en su casa, ella vivía sola en la que era la casa de sus

razada.— respondió Alice simplemente con

rma en la que me hubiera gustado enterarme.—

lice hizo una pausa al recordar la noche de ayer y la petición de Francesco de abortar a su bebé.

uerte por varios segundos.— entonces supongo

feliz de consumar nuestro amor, pero ahora veo que cometí un gran error al irme, él se arrepint

te de ahí. Estoy segura de que Francesco también te ama. Así que te volveré a repetir, no fue tu culpa, estas cosas o

amiga nuevamente, agradeciendo enormem

sco aún, debía confesarles que muy probablemente sea una madre soltera. Con una noticia como esta ellos la echarían a la calle, Alice

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