No voy a perderte
blar con
nde había visto al padre quien se tomab
llo
ormó un nudo en la garganta, é
pasa
mento que tú más lo necesitas, vaya que, si necesitaba a una persona que desconocían situación
erdote que me cas
o todas
discutía con ellos, me sentí más miserable, ¿tod
ero el rostro de ese señor, e
i esposo
risteza en tus ojos pareces necesitar hablar.
anula un m
miraba a la mesa donde César esperaba, ya se hab
es el m
cer la desdicha de estos nuev
hemos realizado el amor conta
lástima, por eso no le c
caso? —baj
es larga.
o, para ver si te
encia, mucha infidelidad, lo último es el ver
, debemos irnos
en alto, fui a despedirme de «mis amigos», en el mismo día no solo descubro la traición de mi esposo, también la
aunque debemos reunirnos entes p
erdote hace un momento, de todos los presentes ell
aso por ti
ico que siempre me ha llamado p
inas, Fe
d, sé que no le cae bien Rocío, pero tampoco fue honesta conmigo. Quería hablar co
olo ella me escuchó, bajó la mirada—. Sandra, llámam
os el
rsona que lo hacía a los ojos era Sandra, los miré a cada uno, sonreí, aunque mis
n juró serme fiel. Hoy comprendí que siempre fue ella, nueve años con ella, ¿por eso no me toca?, solo
encontrarnos en el centro comercial de
a de la hipocresía fue p
emos, «
a se dio cuenta de todo, se veía dolida con su marido. Llegábamos al
la camioneta la carpeta y seleccioné mi archivo donde tenía las canciones que m
a César le gusta otro género, pero no creo se meta o me salga con algunos de s
jalá entienda el mensaje, sobre todo la parte donde dice que es un perdedor. Llega
í el dolor de mi alma y bajé del auto, con mi rostro iluminad
ros, ¿cómo a
, por ellos he aguantado. Los besé,
. —respond
Pa
esta, para él, ellos eran su vida, los fines de semana eran sagrado
de agua idénticas a su padre. Ese amor entre ellos era lo que me ponía a pensar
—Mi hermana salió con los mor
Se acercó, tocó mis oreja
cerlo no pude evitar que l
anas te vamos a mole
Y
iversario es un viaje po
reírme con las expresiones de mi loca hermana. Dicen que era parecida a mí, pero s
s un ejemplo a seguir. Eso se
alá ella crea que son de felicidad, aunque estaba recogiendo p
demás, mamá llegará para esos días y José sabes, es el acuerdo de los dos. —volví a mirarlo y él
s el caso de ustedes, tú la adoras. —Patri ¡cállate!, esas palabras le echan más sal a mi herida—. Yo s
io tan bello, tan varonil, sus ojos ca
tedes ya no quedan, se
fui la primera en su vida, aunque juramos serlo, pero
mpeones al carro, nos vamos a
i! —grit
. —Se despidió mi herm
llegar
miré. Con car
acar nues
aba matarlo—. María Joaquina, ¿¡en qué pier
que éramos novios no me refería a é
se le puede grita
iento
s lo que tú nos has enseñado. —cálmate, cálma
las cosas y era solo subirlas a la camioneta. —No respondí, si hablo llor
uto y puso su carpeta, su música era crossover, sal
ores, te es
rle y mandarlo a la mierda. Las lágrimas salieron una vez ingresé a la casa. Carmen llegó, al verme me ent
ar su atención y el problema radicaba en que si me amó lo hizo hasta el día que entró