La catedral del placer
ar de besarme y morderme los labios, el cuello, el inic
otros también. No nos alcanzan la
jabón que nos hace resbalar por las calles de la lujuria. No podemos contener ni un solo ronroneo, estamos como poseídos el uno por el o
que me lo estoy per
unal haciendo que un pecho salgo fuera justo delante de su boca que no demora en sacar la lengua
como te sientes conmigo enterrado en ti
que su boca me chupe de
ore. Quiero que su boca sepa a mi cuerpo y que el suyo
uja entera con sus desesperadas ganas que comp
fin responde e
ón. Suelto un quejido cuando veo la escultural anatomía de semejante espécimen y sonríe en
una peligrosa violencia que pone en cada mordida y apretón a los que me somete,
rse o pensar en la verdadera natura
que detenga el frene
menos haya valido la pena el instante más
ue no entiendo al tiempo que se arrodilla frente a mi, mete los dedos de
! -suplico paté
i rodilla sobre su hombro y me da un lenguetazo a toda la costura de mi sexo, araño la mader
metiendo dos dedos con facilidad dentro de mí -¡Di
or. Sigue -v
s que entran y salen sin parar y su lengua que combina vueltas y
le estoy arrancando el cabello y entonces
ejar cardenales por donde quiera. Mis nalgas chocan contra la puerta
on ambas manos y me pego más a
o -. Tengo que follarte ya. No p
n y arranca uno para colocarselo. Aparto de mi mente las ganas de quejarme por ver lo preparado que anda por la vida pero es que nada importa. S
amuel porque me ha clavado el falo enorme y duro sin previo aviso.
dita
o, ¿que co
ara folla
y maldito sonríe canalla como parece que le encanta
a y me vas a vol
rda donde quiera y me marque la piel porque estoy tan
ga mucho cuando teng
nte -gime y le a
ente a un tío casado y n
yo y me percute con una fuerza que
ir más aden
sus brazos y me lleva contra una mesa al lado de la puerta, me pone de cara al espejo, sube una pierna a la mesa que me sirve d
muel, nec
s a la vez, van a mis pechos, pellizcan duro...muy duro, mis pezones y yo grito apoy
mujer. Eres
idos de los dos nos vamos consumiendo
y sale de mi. Los pies se me levantan del suelo
tirando con la otra mano de mi pelo empapado en sudo
tras bombea dentro de mi su orgasmo y me mantiene maniatada con ru
od
era mientras sale de mí y yo int
besa con suavidad el cuello -. Vamos a la duch
por
uiero mucho más d
que ya me ha follado a lo bestia y el comentario que
.
, once exactamente
legar a la cama. Reuniones con clientes que pude conseguir mientras él me masturbaba bajo las mesas de cenas de negocios. Follamos en todos los elevadores del jodido hotel y ahora resulta, que ese mismo hombre que tanto me devoró en España, aquí es un maldito engaño. Un témpano de hie
andado a llamar a su despacho me mira de arriba abajo y se muer
o de confianza, Nikk
as, Sh
e a ellos y su marido ni se inmuta. Escrib
para clientes muy exclusivos que
in
r en algún momento h
-me limi
ne lo que está haciendo para oír
darte a conocer entre mis clientes más secretos
su silla para mirarla. Ella le hace un gesto para
¿En qué consiste mi co
días me mira y luce nervioso. No
en el catálogo de los nuevos activos y nos interesa mucho que invierta en la ampliació
e advierte y su voz
in límites
roso. Si apellido me suena de algo, creo que Yanko lo mencionó en alguna ocasión, no estoy segura. Pero de ser así, sería perfecto. Mi ex solo
ten co
tente; pero así como él me ha ignorado todo este tiempo, yo ten
amar a Claud