¿Quién traicionó al rey Leonidas?

miles de hombres no pudieron resguardarlo de lo que merecía. Los dioses no estuvieron de su lado, el Rey Leonidas suplicaba

regiones pero en cuanto al Rey Leonidas, tenía una sed insaciable por mantener el legado de su padre. Me temo que eso c

a una lanza, montado en un caballo y sin mediar palabras perforaron el cuerpo del enemigo, el camin

rar la lealtad con unas monedas de oro, fue perseguido incluso por los piratas,

Duich, al oeste de Escocia, sus amantes lloraban tendidas frente a él, un último respiro al mirar a

ncargaría de dirigir a sus propios hombres, los sacrificios cerca del

oria no comi

idas, le exige que defienda su legado hasta el final de sus días. Pero para ello

vestido de tonos verdes, su corcel con cristales incrustados, su hermoso y largo cabello de color cobrizo, una sonrisa que dejaba

rse casado con la reina Elena. El dinero nunca fue un problema pero a este le gustaba obtener grandes tierras y posicio

era inconcebible, una riqueza incalculable. En el patio de su majestuoso castillo se encontraba la horca, ademá

fila ante un espectáculo, curiosamente no se pagó a un bufón para disfrutar la v

. Sin embargo, fue astuta al ganarse su confianza, permitiéndole liderar parte de su ejército, ella prefirió

strando ser lo que siempre fue bajo la protección de su difunto padre...detestable, era uno de los nombres que el pueblo le

que se enteró de lo que sucedía dentro de esa carreta, Leonidas le confío gran parte de sus secretos y como una tumba este otro pretendía llevarlos de

e su castillo. No le importó despedir a una de sus esclavas estando embarazada, la sacó a patadas frente a todos. Conrad intentó ayudarla, no era tan desgracia

dentro de ese calabozo, la oscuridad era lo único a lo que le temía, el ruido de las ratas le causaba cierta molestia, por lo que compartía con ellas su comida. H

idas, ella era de esas mujeres hermosas con una mente brillante. La hermosa Elena ante su Rey era tan sumisa que podría engañar a cualquiera, a sus espaldas armaba un plan y si este no se llevaba a cabo, solicitaba los servicios de Conrad. La administración era lo suyo pero al ofrecerle unas cuantas monedas de oro podía fácilmente exponer cualquier secreto del Rey. En una ocasión Leonidas le habló a Conrad acerca de una señora llamada Trea, ese nombre le era familiar, recordó que cuando su padre, el difunto Rey Aldous estaba gobernando, ella...ella era la bruja que se citaba constantemente con él detrás del bosque. La verdad pensó que había muerto, días antes de que el Rey Aldous partiera de este mundo y se fuera al infier

bol, ella era una mujer bastante mayor, cabellos largos entre entre grises y negro, su figura no era precisamente de una joven hermosa...pero al entrar al río era como si cada gota de agua que rozaba su cuerpo la transformara, decía unas cuantas palabras, p

ous, se comentaba acerca de la historia de Trea. Desde entonces, se dice que la mujer tendría al menos 150 años, alimentarse de los corazones de sus víctimas la mantenían en perfecto estado de salud.

, podía llevar a cabo su gran estrategia. La reina Elena salía a los grandes banquetes junto a su dama