Un trato con el casanova

Demasiado fuerte para malgastar energía en lágrimas que no resolverían nada, que no me pondrían el dinero que necesitaba, que no me daban ideas de qué carajos

nía que hacer el trabajo sola, lo que agradecí porque la había estado ignorando desde que salí del West Jefferson Medical Center LCMC Health.

las necesarias para el contrato p

imas con rapidez, pero me vio y colgó el teléfono. Su rostro era la encarnación viva de la preocupación, lo q

untó antes de acercarse y

s lágrimas fluyeron mucho peor, solo las saqué al punto de la indignación. Me sentía morir, me sentía horrible, m

lo que sea que te

entí mejor, me limpié y lo vi a los ojos con

ue tengo que tr

mí—, algo muy jodido como para que l

—espeté con sarcasmo mientras cerraba los ojos y apretaba los puños—. En es

eño fruncido, lo que era común porque esos dos no se toleraban

labio con ansiedad, fr

cerebro que, si no se opera, la matará más rá

nto muc

s con los recursos para costear el tratamiento… Eso no nos deja en un buen sitio y a menos de

ie

e soltado, ya he llorado, solo debo recomponerme co

que me lleve al

i qué dec

cosa estúpida, al

debe casarse con alguien —dijo de repente y frunció el c

ué locur

sado para ella —expresó antes de cruzarse de brazos—. Y l

que la conversación loc

ebrio al que casi le pateo el trasero en e

, Tams? —preguntó de repente

da Jenna de que me viste así hoy o te sac

o a él, pueden beneficiarse mutuamente —expresó con diversión y por un momento me perdí de lo que habla

muy en

ue estar

te todas las deudas que tú y tu familia tienen, puede ayudarte a pagar el mejor tratamiento, los mejores médi

ra el hecho

a idea —dije lo primero q

él. Ve mañana, toma un momento y llega directamente a su oficina, le avisaré para

e si podría hacer algo tan loco como casarme con un desconocido, con

, no imaginé que el hombre me haría firmar un acuer