Amor: mi adicción fatal
edrez y que sabías de caligrafía, pintura, canto, baile e incluso cocina. En fin, que eras buena en todo y que no había nada que no pudieras hacer. Y lo que es más importante: dijo que podías satis
rme contigo?", replic
stante. Tal vez tu madre pueda venderte a otros hombres adinerados a un buen precio", agregó él con gran desdén y
ro pálido debido a la vergüenza. Si fuera cualquier otra muje
ón avergonzada, dispuestos a no dejarla ir. "¡Baila
casarte con Ron, ¿no? Él quiere vert
er reservada, no vestirías así en público. Es obv
odada?", dijo una mujer con sarcasmo. "Tus padres te han vendido de
o eres tan desvergonzada que todavía te quieres quedar con él
s y están muy enamorados. Son la pareja perfecta, pero
er su realidad. ¿De verdad crees que serás f
lugar de ser tan descarada como para quedarme a su lado. Sería tan
nza y solo quieren dinero. Por supuesto, tampoco se respetan a sí mismos, ya que son capaces de hacer que su hija se case con cu
as que no tenían una buena relación con Ron no podían soportar más la situación ya que creían que,
a se habría suicidado ah
entara cada vez más. Quizás esto se debía a lo indiferente que era Cherry con las personas que la humillaban, o quizás a la molestia
había decidido quedarse y soporta
de casarse con un hombre
y valiente. En realidad, no era tan mala como la gente la describía. Si no
esperaba y aun así le dio su abrigo a una
permitir que tantas personas acosen a una chica tan linda como ella? ¿Realmente puede llamarse hombre? ¿Cómo se le ocurre obligar a una joven a hacer un estriptis frente a toda esta gente? Ella ni siquiera se ha graduado de la universidad; es
s mientras su pecho subía y bajaba. Estaba claro que hab
ntinuación. Sin embargo, la gran mayoría pensaba que se iría o que
tillas y extendiera los brazos, lista para ba