Corazon sin ley
ba
dé con mis amigos el mediodÃa ir a la playa, primero pasarÃamos por sigo, un supermercado, y luego nos irÃamos directo a
y una sexy fresita, ambos juegan conmigo y lo dicen por el color rojo de ambas. Creo que si pudiera ser algún vegetal sin duda serÃa el brócoli,
os ayer, aunque le dio me gusta a la foto que subà con mis padres. El Dr. La Cruz es un bomboncito que está listo para degustar y no empalagarse, y sÃ, he revisado sus redes sociales como
mar la atención de algunos hombres por mi cabello, pero no busco amor eterno, solo una aventura, si se dio una noche,
a no se me da nada mal, eso lo reconozco. Me voy a bañar faltando media hora para las doce, me coloco un traje de baño azul rey, me encanta, lo amo, me pongo una falda de blu
o y su mamá, la señora Teo. Nos ama con locura y prácticamente nos adoptó a mà y a mi amiga. Haremos un sancocho en la
ue no parrandeo y sÃ, me gustarÃa. Me convenzo de ir al notar el comportamiento de mis
os tomamos unas cervezas, no soy amante a ella, pero nada más bueno para el calor que una buena cerveza bien frÃa, en
siento que me están mirando y decido no voltear para restarle importancia. Estamos en una playa, hay ojos en todos la
ede ser posible, ¿señor por qué me
rcásticamente. Juan La Cruz me queda viendo de arriba abajo y deja su mirada en mi cara, ese hombre me ha hecho un descaro escaneo y yo me he
este, que me lo como con la mirada -
ya sé que está par
¿y a ti que te pasa? -cue
me ve con una sonrisita tra
Cruz, alias el doctor bonito, no lo niegue
una voz detrás de no
hean? -pregunta Arnaldo. Y la rubi
s de chicas guapo -y le guiñ
, ya lo sa
Cruz? -Pregunta y yo asiento
arme a cierto doctor que está en la churruata a mi izquierda. Medito sobre salir esta noche con Fed
vorita, que gusto verte,
emente- está usted muy gua
rle unos exámenes de rutina para una operación y desde allà se hicieron amigos, es estúpido que no haya coincidido con su hijo, aunque según tengo
estás hija? Juan, cariño ven para que conozcas una amiga -volteo y el dueño de mis pensam
ce que el destino le encan
, eso p
ya quisiera tenerlo yo asà -r
sa sonrisa no me gusta, mi amigo por su lado nos observa y niega con la cabeza, ya sabemos lo que él
Me hace gracia ver a los hermanitos de Arnaldo, Albert y Arianna, están en plena adolescenci
do su esplendor. Volteé varias veces y noté la manera tan descarada de cómo me observaba
y yo me quedo para llevar lo último. Cuando escucho de
-dice sorprendiéndome- es de
o no coordina bien, ¿pero e
irme, un gusto v