Juego de poder

sti

revisar si en su teléfono había algún número a quien llamar, pero ningún número decía nada de "Ma

pero nada. En eso, sonó una llamada entrante. D

―cont

ando a Almendra Río

miga o famil

da, su mano derech

en el Hospital Sur ahora, la están re

le p

conocimiento y ahora no está un poco mejor, aunque creo que ne

yo voy a

cerca d

n la tienda,

vo adonde haga falta y le aviso. Puede que le den el alta pronto y no sea necesario que venga, o quizá

gracias,

ián U

ezco lo que está ha

oce a su familia? He busca

familia. Solo

supe qu

aré esperando

no hay problema

a pro

ndo. No tenía familia,

untó mi amigo, lo vi ac

visando para ver s

comunicarte c

ti

ar con ella, ¿qué vas a hacer? Sup

es te vas, yo p

migo, mira que corren mucho peli

ro? ¿Po

e vi cómo la mirabas y c

labra, seguro mi amigo me

gustaron altiro, no

ndo, parece que fuiste tú e

í, pero no te lo pued

ecina y tuvo una contusión no menor, ¿qué querías que hi

a de eso y

trata entonc

chica no es par

o menos, me gustaba como cualquier chica con la que me podía cruzar en la calle. No era especial ni nada. Además, lo que estaba haciendo, lo de ayudarla, era un acto solidario, humanitario, no podía dejarla allí

ara apartar ese ho

ene ―me indi

cibirla, venía caminand

tes? ―le pregu

a de explotar una

son

es en serio

ti, ¿qué dij

go reposo por tres días, luego de eso, t

eron li

pero no la necesito,

que te lleve a

masiado por mí,

ado o no, y si me preocupo es cosa

ste que solo porque no t

xana, le dije que ya le

lamaré cuando

amo

pasar por R

e aquí,

cancelaba la atención, me volví, mi amigo tenía una expresión b

r y me encaminé

mos a su ca

muy bien q

es? ―dij

mos a ella y yo le toqué el ho

eguntó so

emos a la farmacia a comprar los

al parecer, se mareó, pues

gas movimientos

amioneta que mi amigo fue a buscar para esperarnos a la

te si

dije, h

e quedarte otro ra

acá o allá va

ue te pueden atender en

no me gustan los hospita

gustan. ―”De hecho, tengo muy malos recuerd

u casa? ―le con

ella y mi amigo y yo

legaremos altiro ―repl

, es que es lejos y m

y tendré que manejar más ―respondió Gustavo―, as

que contestar, si es muy lejos o

ndes. ―Y nos di

ta ―ironizó

o, puedo to

amé―. No estás en condicio

camino. Nos detuvimos en una farmacia, el resto del cami

―le pregun

bajarme ―

acuestas y

acer. ¿Por qué las mujeres lloran? No deberían ha

? ―atiné a

a tonta, tengo e

so po

cabo de dar cuenta de q

nforme médico, tienes que estar bajo super

mar mi atención, pero y

na carga, apenas

, yo te puedo cuidar ―m

s de mi

s ir a ver al médico, podrías haber ap

pueda quedarse contigo ―replicó mi amig

ia familia ―respond

tigo? ―le habl

me obsequió una d

stavo, si quieres te vas, yo m

tó, por ver esa sonrisa en la cara de