Mi Alpha Protector (II libro)

zo olvidar momentáneamente todo lo demás. Amo a esta mujer. Y por eso, le daré todo el espacio que necesite. No quiero presionarla de ninguna m

sar de todos los sube y baja que habíamos tenido, todo par

egunté al sentarme e

n mi regazo. Sonreí al sentir su calidez y la rodeé por la c

te -respondió ell

ono exagerado-. Posiblemente te quedes sin hij

eré el único niño de mamá...

se oscureció, Francheska soltó una r

ndo otra galleta de la mesa-. Además, él no morirá. Tengo esperanza e

n se ensombreció. No entendía Po

a? -preguntó en

camiento en su garganta delataron que la pregunta la había tomado por sorpresa. ¿Qué pasó entre ellos?, Era algo que aún no lograba enten

ltad y, luego de un momento,

dó en el pasado,

sagradaba. Automáticamente, llevó una

í el

-pregunté co

entamente co

de esta mañana tengo comezón y no sé

ame

ostrándome su cuello. Me ace

je y, sin poder evitarlo

stremeció

ormal. Realmente tendrías que estar dormida mientras

on ternura antes de acomod

so de pie

renar -anunció sin más,

curiosidad.

despidió antes de marcha

spiró y tambi

... -dijo con un leve s

cheska pasaba todos los días observándolo desde lejos, como si

tamente y des

pagada-. Después de todo, soy una vampira.

sonrió co

e rechace... él

r un momento, asim

o pase... Pero

rada y me dedicó u

ias,

la vi m

s brazos y me llamó co

mo

do su cabeza mientras acaric

donos -susurró sin levantar la cara d

se tensó a

ómo

da no hay nadie con ese tipo de san

se entr

o lo

el rostro y me

sde mi último cumpleaños.

de orgullo al es

osotros, pero su aroma lo arrastra el aire -agregó antes de suspirar pes

isteza e

ntón y la obli

enes a mí y a los

vio aviso, me besó los labios

mo -s

como un

e amo

oz profunda y grave. -Y no solo eso... esa perso

íbula s

e tendrá a mí. N

rucándola mejor en mis brazos. Con el pasar de los minutos, su respiraci

drugadas. O está en la biblioteca, buscando una forma de liberar a su hija d

antes de levantarme con cu

uré antes de depositar

lado. Inmediatamente, ella se pegó más a mí, frotando

eó sua

qué tier

sin darme cuenta, el su