El hechizo de tu sangre

Vex, Prov. de San

aunque en algunas oportunidades subía durante el día para mostrarse con los

ndo de sus recorridos para la cen

omo de la lejanía donde podía divisar un lago entre las montañas. El paisaje aquí era muy p

smos ojos, aunque su personalidad era muy diferente, pero quién sabe si Anne Marie hubiera vivido h

los turistas en el caso de tener que hacerlo. Pero en lo personal era bastante tímida e introvertida, hasta temerosa se diría. En su puest

dejara fuera de cualquier culto cristiano, había empezado un camino diferente y en él aprendió otras cosas que le pe

dentro de su círculo cercano. Debería haberlo informado a Xander, sabía que se estaba saltando los protocolos; como también sabía que una vez que su superior se enterara de que sucedían estas cosas y además que incumplía las leyes,

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Vex, Prov. de Sant

tina, se sentía a gusto, el trabajo era bueno, ya le habían paga

r lo que también había podido “olvidar” su

los pumas, ya que, aunque nadie había visto ninguno se habían registrado algunos ata

es se interrumpieran, sino que también que algunos empleados hubieran tenido

pasado el tiempo, sus heridas no cerraban todavía, en su ca

rsidad, Iván y Camila se pusieron de novios antes de quinto año, cuando tenían dieciséis años. Andr

o lo de la universidad, porque su abuela sólo tenía una pensión, ya que era viuda y nunca había trabajado.

padres murieron cuando Cami tenía cuatro años en un accidente automovilístico. Al perder a su abuela,

ado en Turismo un año antes del fallecimiento de la abuela Elisa y había empezado a trabajar en un hotel de una cadena internacional. Camila, en ese momento, trabajaba en una tienda de ropa en

o apareció Soledad; ella también había terminado la secundaria junto con todos ellos

i a Iván y And

guntó Camila si

no pudo ver la cara de Camila mientras la escuchaba. - Me acuerdo en la última fiesta de la escuela, que se besaron cuando vos estabas de espalda, yo

spard estaba ahí, preguntándole si estaba bien, “¿En qué momento había entrado en su of

e los llevó a la cara poniéndose de pie de un salto para

te para pasar el nudo que se le había hecho

el escritorio para pasarle la ma

ce que es

un lapsus - se excusó. -

uieres

ejándose y ya mirándolo de frente. Con toda s

ás el resto del día

intentó sonreí

tás s

Qué nec

morzar, como no hay nadi

consolarla y por eso le estaba haciendo esta propuesta; de todas maneras, era verdad que no

taría - esta vez su son

l teléfono y marcó

Camila al segundo subsuelo? - Él se mantuvo oyendo

a un intento más de distraerla, y funcionó, porque en esos minutos que bajaban hasta el segundo subsuelo, ella logró reco

de sala de recreo, tenía estantes llenos de libros en una pared,

copado!

o un ruidito como si se activara una cerradura electrónica; la verdad que no entendió cómo la abrió, pero ingresaron. El lugar tenía una distr

guntó, pensando que se le deb

lando la primera en

dividido en tres habitaciones, una con una especie de jacuzzi ovalado, otra con una ducha,

naturales, pues el lema era “una experiencia campestre”. Además de eso, también tenían un conveni

te a lo que pensaba que iba a ser denso estar tan abajo, no er

e la comida est

- dijo alejando una silla de

uzando por una sala

rac

d de hablar desde que llegas

speró a que él empezara a com

incipio le costó no comerse de vez en cuando un plato de tallarines, acá no consumían harina de trigo; Gaspard decía que eso no era sano. También tomaba mucho menos ma

e, sólo te queda un mes

iles de seguir, y el trabaj

¿es lo que t

ue estudié - re

que trabajar, ¿esta

ue trabajar no tr

sta hacer cuan

o series, sacar

, pero también

a so

curiosa preguntó: - ¿Por qué estás acá

en - explicó. - Además, así no se oyen los gritos de placer de mis amant

mirarlo, imágenes fantasiosas de su cuerpo desnudo vinieron a su mente; pero al ver que él sonreí

dice que no tienes fa

un accidente de auto cuando yo tenía cuatro añ

ni primos, ni

enía familia y mi

e amigos en

tando mirar sus ojos, que parec

ablas c

redes sociales. ¿

el y Alba son más cercanos

o los co

aburriría en este momento. Y dim

el árbol genealógico, pero me resultó muy engorro

apellido suizo -

me veo suiza, ello

lgu

pard, que había dejado en medio de

- res

. Parece que algunos de la cabaña cinco, salieron con la tormenta y se perdieron.” Oyó ella incomo

ya Camila v

- empezó

tiempo a pensar. Llama al 911, si no lo

ió y salió ráp

cesa detrás de Gaspard, había estado bien, pero subir a las apuradas con esta ropa, era otra co

os extraviados aparecieron sin saber cómo se habían perdido,

e abducían a los turistas, otros decían que Gaspard lo sabía y que era un reptiliano camuflado. Pero la verdad p

cabaña, pero él no estaba por ninguna parte. Pasaron 15 minutos, hasta que por fin atendió el

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Vex, Prov. de San

eléfono, la preocupación com

la zona. Xander Ackerkrivy, era conocido entre los suyos por ser uno de los

a relación cercana y se consideraba no sólo algo ext

l mismo del asunto, dejando entrever que pensaba que tal vez, Alba o Raphael estuviera

odos para resolver estos temas no eran del agrado de Gaspard, y Xander, como la mayoría de

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Vex, Prov. de Sant

ara ver los cv de postulantes para la siguiente temporada. Así que, a

erta. Era la voz grave de Gaspard y sonaba dura y fría. Ella no pudo entender lo que decía, aunq

Alba salía veloz y aparentemente

pasaba nada, caminó entre los dos y entró en el desp

en el escritorio, como si se sintiera exasperado, un mechón

dijo mientras se ac

uedo volver e

s nece

ver

lo que ha

ía llegando cuando

éntate y trabaj

la impresora que se encontraba a su derecha, debajo

cenciados, con buenos título

para c

Esto crece y es momento de delegar. También quisiera una empresa que se ocupe de la limpieza de las cabañas, y a

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r, luego de ver su foto y saber su ascendencia, pensaba que sería como recuperar su amor perdido, pero pronto l

cuando ella le dirigía su mirada transparente.

pérdida, hacía tiempo que habían comenzado a diluirse, y la llegada de

o antes que él. De ser un malviviente vagabundo, se convirtió en el empresario Gaspard Jean Genolet Dumarc, se decidió a recuperar las tier

a de su amada, se trasladó a Argentina y encontró,

ida, lejos estaba de lo