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Noches en vela

Capítulo 2 Una oportunidad

Palabras:2950    |    Actualizado en: 04/02/2022

do actuar de la forma en que lo había hecho y mucho menos podía comenzar a comprender lo que se le había cruzado por la mente para estar en total intimidad con un completo extraño y además como comodí

as luces en aquella sala de cine, no

ntero cada vez que rememoraba los sucesos del día anterior, ella quería olvidarse de lo que había sucedido y al mismo tiempo solo quería repetirlo, su conciencia moral le decía que no debía hacerlo, que se alejara del hombre y que se olvidara de todo pero su cuerpo y deseos bus

de él, de Rafael y no había podido borrarlo, había quedado guardado nuevamente en su cartera. Ahora estaba cerrada en el mismo lugar de la mesa donde la había dejado la tarde ante

te y luego salió de casa para dirigirse al trabajo. Se subió en su carro para iniciar el camino que le llevaría treinta minutos, llevaba la dichosa cartera en el asiento del copiloto y ni por la seguridad de su vida y de la de los demás podía dejar de ver

a a la suya, esta le pertenecía a una de sus amigas más queridas y colegas en el trabajo. Anastasia, era alta y esbelta, de piel morena con pelo rizado junto a una personalidad ardiente que hacía que todos los hombres se sintieran atraídos a ella como moscas a la miel, era una habilidad que ella nunca había poseíd

ó Ana riendo luego de que

hagas repetirlo- con

a -es la historia más interesante que me has

abales- explicó ella sintiendo pena -estoy a pun

que te engañó, puedes hacer lo que se te venga en gana y el imbécil ya no puede decirte nada porque él fue quien

sexo, yo… me da miedo encariñarme, si ya ni puedo dejar de mirar

jo Ana con una sonrisa -pero nunca dejes de di

-después de todo mi esposo era un

n ojos perspicaces -ya deja las excusas, r

a que se encontraba dentro de su cartera, la abrió con un suspiro dándose por vencida y sacó el teléfono, buscó el número escrito entre

ntiéndose tonta. Inició su trabajo del día pero al escuchar e

o y seas la mujer del cine.

ella se

, Cassy es muy bonito. Me

que me dier

a experiencia fue tan

tan fácil” escribió el

ía, solo decía que me g

hora y no puedo seguir habla

tiempo entonces, espero

ban en su cuerpo que hervía como la lava en un volcán, no se había sentido tan emocionada desde hace demasiado tiempo y se alegraba del consejo que le había dado su amiga unos minutos atrás, no debía arrepen

mir, pero la emoción del día aún se mantenía en su cuerpo por lo que no podía descansar, daba vueltas en la cama sin poder detenerse

do?” preguntó

, me encanta q

mir, por eso pen

escribas, sea por

bueno qu

istece es que de esta

daría cuenta del significado ocu

lto, no puedo dejar de pensar

u cuerpo excitado comenzaba a calentarse. Se reía como una n

o querría verte

enos y un tanga del mismo color que era uno de sus favoritos, apagó la mayoría de las luces, dejando solo algunas para que el ambiente fuera bastante sensual y luego con su celular se colocó en su cama para iniciar una video llamada. No podía creer que realmente es

la cámara -esperaba tantas respuestas negativas pero jamá

ó ella sonrojada ace

mo tono quitándose la camisa y rec

e estás poniendo cómo

a minúscula tan hermosa- dijo él con voz oscura

lo que me pidas- susurró ell

ó él -tan valiente y

ptó ella

acercándose a la cámara -tócate los sen

larlo, pero solo quería que él lo viera y se sintiera tan excitado como ella lo estaba. Sus pechos se veían grandes y atrayentes en la cámar

pezones hasta que se vean a

ran dos guijarros que se transparentaban sobr

lusa suavemente- pid

bio- pidió ella temblando -tu pene se

Cassy se quitó entonces el top que estaba usando dejando que sus pechos rebotaran, sus pezone

te como hiciste ahora- ordenó -

botar sus senos tal y como él deseaba, gemía mientras

trame tu culo- ella hizo lo que le pedía mostrándole un primer plano de sus nalg

caliente que si en ese momento él le hubiera pedido que se acariciara y jugara con su clítoris se habría corrido en tres segundos, solo que él no lo hizo, la mantuvo en esa posición por al menos

en tu habitación- casi rogó

ca se hacía agua de deseo, se lamía los labios con la vista fija en aquel trozo de carne que tanto deseaba de nuevo en su cuerpo y aunque no dijo nada la mirada que ella le la

l juguete cari

do y no tan largo pero a ella le encantaba porque se sentía increíble dentro de su cuerpo, además tenía niveles de vibración que la hacían te

nunca tocando tu clítoris, penétrate, húndelo en tu humedad para mí, usa la vel

l dildo jugando con su cuerpo, tenía las piernas abiertas de par en par para que él pudiera apreciar la humedad de su excitación, el juguete se hundía con facilidad en su interior con un chasquido debido a sus jugos mientras ella gemía con fuerza, estaba tan cer

ael -quiero que lo coloques exactamente

unto a ella con su mano firmemente agarrada a su miembro, se movía a una velocidad increíble que se veía tan sensual y con esa vista ella se rompió, se corrió temblando, su vagina palpitaba en la cámara dejando a sus jugos fluir, sus ojos se centraban en él hasta que de sus labios salió el nombre de Rafael en un grito y luego no pudo hacer mu

s- dijo de pronto

la riendo -pero la verda

etición?- Preguntó él acer

ro,

e estás- pidió él con u

ohibido- dijo ella riendo con fuerza. Se acercó a la cámara mostrando e

probarte- suspi

de alejarse y cubrirse con l

es bastante tarde-

viéndole la sonrisa -espero

marme- dijo riendo pa

ientos calientes de Rafael cerró los ojos, aún permanecía la preocupación en su mente de que su corazón se aceleraba de emoción cada vez que hablaban o tenían aquellas citas tan

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