Él puso fin a nuestro para siempre
de A
elta a la conciencia. Mi compañera de cuarto, Chloe, me estaba s
stá en el techo de la Torre Sur! ¡Amenaza c
ectura tenía sus clases de estudio. Se me cayó el estómago. Derek. El acosa
de la cama de un salt
s manos-. ¡La policía está aquí, seguridad del campus. Han estado tratando de conven
alguna razón para creer que yo lo "entendía". Pero sus palabras, las que me había gritado sobre Benja
ompleto, mi celular vibró. Era la pro
exige hablar contigo. Está inestable. La policía cree que tu pres
idea de que alguien muriera, y que mi nombre fuera el último en sus
entes: patrullas, ambulancias. Se había reunido una multitud, con los rostros levantados, mór
hacia mí, con el rostro como una máscara de preocupación. -Aman
e, mi voz temblando-. Apenas lo c
. Está convencido de que eres la única que puede ayudarlo. Por favor. Solo habla con él.
ecesitamos que suba. Despacio. No haga movimientos bruscos. Solo escuche lo que tie
aterrador. Cuando las puertas se abrieron, el viento aulló, azotando mi cabello alrededor dedidos, su cuerpo balanceándose precariamente. Su ropa estaba des
u voz cruda, resonando en la
ando de mantener la calma, aunque por dent
angre. -¡No entienden! ¡Nadie entiende! ¡Pero tú
guiendo las instrucciones de la oficial a través del auricular
. ¡Pero podemos estar juntos, Amanda! ¡Podemos empezar de nuevo! ¡Solo tú y yo! -Dio u
arganta. Pero estaba demasiado ido. Se abalanzó, no
de policía, moviéndose demasiado rápido, demasiado bruscamente, chocó conmi
esapareció. Sentí la horrible y nauseabunda ráfaga de aire, la ater
a cornisa, no lo sabía. Mi impulso cambió, pero la caída no se detuvo. Rodé, golpeando el s
do mi cuerpo. Intenté moverme, pero no pude. Mi visión se nubló, los sonidos se volvieron apagados. Estaba t
un eco de otra di
un hombre, llena de furiosa acusación. Sona
no hice esto! -Era la voz d
inado a Jenna! Pero tenías que interferir, ¿no? ¡Tuviste que cambiar tus afectos, cambiar la línea
a. La persona que llamó. El "yo del futuro". ¿Esto era lo que había querido decir? ¿Esta era la "evidenci
manda! -La voz de Benjamín estaba
las mentiras sobre ella. La alejaste, justo en el camino de este destino retorcido. -La voz m
, mucho peor. La inseguridad de Benjamín, su fácil creencia en las mentiras de un extraño, sus afectos cambiantes... me habían ro
de mí. Mi visión se oscureció. Las voces se desvanec