El espectacular regreso de la esposa descuidada
sta de Elen
i fuera la dueña del lugar, una sonr
nroneó, pasando una mano sobre su vientre
mi escritorio y presioné el pequeño y discreto botón que activaba la función de grabación d
el sutil
o tan precavi
te preocupes, no estoy aquí para amena
que era a la vez
tú no serás nada. Seguiremos siendo mejo
udad de México con nada más que una maleta andrajosa y una historia de un pasado trágico. Su familia era un desastre de adicciones y abusos, una historia que contó con lágrimas tan convincent
mo, para manipular a todos a su alrededor, incluido Bruno. Había jugado con su culpa, su deseo de ser un
jo, su voz bajando a
Estaba desesperada. Tenía q
inó más
e salida. Este bebé e
e vitaminas prenata
ar a tomarlas. Pensé que podrías s
de mi consultorio, dejando la receta a
esplomé en mi silla, el peso de la doble traición oprimiéndome. Habí
mi escritorio zumbó violentamente. Un c
a de caos. Mi padre jadeaba por aire, su rostro de un aterrador tono azul. Y Sofía estaba de pie junto a su cama, su mano
n sonido crudo y an
ente para salvarlo. Vi la línea plana en el monitor cardíaco, oí el pitido ensordece
peranza por un nuevo corazón que finalmente estaba programad
do, surgió a través de mí. Me puse de pie de un salto y me abalancé sobre Sofía
reciso momento, Bruno apareció en la
los esparciéndose como gotas de sangre sobre las baldosas blancas y estériles. Se abalanzó sobre mí, agarrándome la cara, sus
tás haciendo?", gruñó, su r
de mi hijo! ¿Has p
, las palabras ahogadas
la mató a
ella", ordenó, s
ho
osa a Sofía, que ahora
o a ella, su v
, si sigues causando problemas, h
ecordatorio escalofriante de que para él, So
a para irme. No podía estar en esa habi
a actriz, se apr
", lloró, saliendo corr
brazo de nuevo, tira
voz una amenaza baja. Se inclinó y besó la com
. Volveré a ver a
, un gesto final
ate b
nta demasiado apretada para hablar,
e acercó, su rostr
o siento mucho. Su
ego bajó
le para él... el señor Garza canceló la donación hace do
Me desmayé, el último sonido en mis oíd