El Arrepentimiento Milmillonario de Mi Exesposo
Ocho
Mis brazos casi se afloja
, su voz teñida de una oscura diversión. "¿Quier
ada? ¿Humillación pública? La idea de sus caras, las mentiras, la lástima... No. Destrozarlo
ndo los escalones, ignorando los gritos ansiosos de César desde
lla se cierra de golpe, a
is piernas como gelatina, y apenas logro so
rren por mi rostro. Me las seco apre
se afloja la corbata mientras se adentra en la vasta y silenciosa ca
antalones oscuros. Está recostado en un enorme sofá blanco, c
onrisa de complicidad juega en sus labios. "Ya
tada. Recuerdo su conspiración fuera de mi h
digo, mi voz fría. "Ninguna canti
tración en sus ojos. "No estamos hablando de la casona. No por ahora". Su
y tu mejor amiga se han estad
de un video y lo lanza sobre la mesa de
as, desconectadas de mi cuerpo. Estaba preparada
ésar llegando justo después de que yo me voy a trabajar por la mañana. Lo muestran besando a Valeria, un beso desesperado y ha
os, César había sido tan comedido conmigo, un perfect
me recorre. Todo mi cu
ra soportar verme quebrarme. "¿Estás
ranquilo, tan transaccional, después de mostrarme la
se instala. Esta es mi nueva realidad. "Aparte de la casona", digo
uerta, lista para salir a la
error", dice su voz detrás d
asco atraviesa mi sorpresa. "¿Quieres quedarte con todo, verdad?", acuso, girán
sperado. "Sin demolición. Si aceptas, juro por
e la familia. Una esposa. Una adecuada. Tendremos una boda, una rea
bsurda, que me toma completamente po
sosteniendo los míos. "Y me odias. Así que n
su expresión, todo es una actuaci
teléfono vibra. Un
te algunas cosas en mi cas
r deshacerse de mí. La última de mis
os temblando. *Lo siento, no recuerdo. P
ura restaurada, mi corazón
"Pero quiero un
-