La Novia Traicionada: Su Deuda Más Cruel
n mi pecho. Una pequeña y tonta parte de mí todavía se aferraba a un hilo de es
Y entonces lo oí. Un suave gemido desde adentro. La voz de Jimena, si
dibles. Eran íntimos. Era
n cenizas en mi boca. Mi amor, mi vida, mi futuro..
me di la vuelta y me alejé, mis movimientos rígidos y robóticos. Huí de la fiesta
d, la imagen de ellos grabada en
camisa arrugada, un leve olor d
he?", pregunté, mi voz
mente avergonzado. "Jimena... no s
palabras sabiendo a veneno
o es lo qu
me mientas, K
dió. Lo siento. Pero no volverá a pasar. Todavía nos vamos a casar.
r. Yo era la deuda. Yo era l
senté allí durante horas, entumecida. Finalmente, el agotamiento
l estaba de pie sobre mí, su ro
gruñó, poni
?", pregunté, atur
metió en su coche. Condujo como un loco, las luc
udillos blancos en el volante
hablando? No am
pital ahora mismo. Dice que la llamaste, le dijiste que i
na. Estaba torciendo las cosas, pintándome com
s verdad! No he
ó. "Si algo le pa
uces de emergencia. Una pequeña multitud se había reunido abajo. Jimena estaba
stró a través de la multitud, su
aquí!", gritó.
a belleza. "¡Kael! Ella dijo... ¡dijo que se lo
Jimena! ¡Te lo pr
n ella. Negociando p
", dije, mi voz deses
del borde. "¡Kael, haz que prllameantes. "Prométeselo, Alicia
e loco. Le creí
Jimena soltó un sollozo teatral
Kael volvió a e
o estaba de pie cerca de una sección más baja de la azotea, un parapeto decorativ
ena, atrayéndola en un abrazo protector. Vi la mirada de
se inclin
es estab
creto de abajo fue a Kael, acunando a Jimena en sus bra