Su Trigésima Cuarta Traición Accidental
extraños. Un grupo de jóvenes médicos con batas
son ustedes? -pregu
oven con lentes, d
. El Dr. Ferrer es nuestro mentor.
tinuar, una voz femenina
ser una vividora a cos
una mueca de desprecio en el rostro. A su lado, c
inuó la chica, su voz goteando desprecio-. Aferrándote a él por alg
vadió. Durante años, había aceptado el cuidado de la familia Ferrer, creye
n la persona que realmente ama -dijo, mirando significativ
mejillas, la viva imagen de un alma ofendida
idente i
pujó sobre la familia Ferrer en cuanto murió tu p
ué tre
etorcían el recuerdo de mi madre, una mujer
ico que no po
orándome-. No se atrev
cé la mano, con la intención de abofetear
se movió, interponiéndose
ue una bofetada fuerte, pero el soni
dose una mano al rostro, con los ojos
é demonios e
a. Acababa de entrar. Vio a Kaila agarrándose l
ma con tal fuerza que mi cabeza golpeó la cabec
pura fuerza de su ira era
endo con una nueva ola de dolor. É
aila, su voz se s
jilla, su toque lleno de una ternura que ya no me mostra
e lanzaron miradas de
mián regresó, su rostro
te con el
e. No me disculparía por una tra
e ha malcriado durante demasiado tiempo, Elara. ¿Crees que
con la voz temblorosa-. Kaila se int
ián no se suavizó.
ivocaban? ¿Crees que
Estaba de acuerdo con ellos. Creía que yo era la
a y burlona apare
urré-. Me
cama, caminé lentamente hacia su consultor
la vista cuando entré, un destello de triunfo en sus ojos an
que su consultorio estaba prohibido. "El trabajo
s solo se aplicaban a las pe
o era tan agudo que
rgullo, mi dig
con voz plan
, fingiend
ed es la prometida del Dr. Ferrer. Es la esposa
uido. Tenía el ceño fruncido por la molestia. No quería que
mi corazón roto se
dócilmente-. Tendré más cuidado. -Se volvió hacia mí-.
más insultante que
e dijo Damián, con
las uñas clavándose e
que corría por el pasillo chocó conmigo. Perdí el equ
ltorio, escuché la voz
ás bien? ¿Te
frío y duro, compl
por mi rostro, calientes y silenciosas. Me cubrí la
orio. Dijo que la llevaría a un almuerzo especial para "d
ar maravillas de lo dedicado que era el Dr. Ferrer a su prometedora estudiante, Kaila. Fueron juntos a congr
. Él siempre había estado "demasia
siendo metódicamente despedazado.
de la ciudad, una sensación de calma me in
ba h
. Y me iba a li