No Hay Segundas Oportunidades Para Los Tramposos

eléfono personal, sino un pequeño dispositivo encriptado. Me a

llamada

voz tranquila y profesional-. El proto

ias,

se haga, no hay vuelta atrás. Al men

o de mí. Familia. La palabra se sentía h

año que compartía mi cama. Un socio come

l protocolo, quiero que todo sea borrado. No solo mis registros públicos. Quiero

pausa al

rado que reservamos para agentes quemados. Es

etado mi papel. Nadie, ni siquiera mis contact

gañó,

salieron plan

suspiro llegó a tr

de ella hace unos meses... la que me pedis

decir más.

. Arregla tus asuntos personales. Una vez que est

livio me invadió. El plan er

o tendría que luchar por los bienes ni escuchar su

, Fredy.

cuídat

mi bolso justo cuando Damián a

preguntó, sus ojos entr

ro una máscara p

ería desearnos un

pestañear. Era una me

go se relajó, su sospecha se desvaneció. Me rodeó co

sabes, ¿verdad? Est

qué pasaría si le preguntara aho

mente se

broma. Le había preguntado qué debería hacer si alguna vez me engañaba. S

reces, pensé. Serás exclui

acercó. Sostenía un archivo en sus m

upción. Tenemos una actualización

nto cambiando instantáneamente

ué

a mí, creando un pequeño espa

y su subordinada. Su actuación era impecab

suerte de descubrirlo. Suerte de tener una s

ra una cuenta regresiva

tro, tres,

í, su sonrisa amp

iversario

olores brillantes. Un espectáculo masivo de fuegos artif

sus ojos en los fuegos artif

llaban. Diez años. Se s

no era el hombre con el que me casé. Ese hombre había

luminado por los colores parpad

staban a punto de tocar l

, un destello de fa

molestando ahora? -murm

ado por una compleja mezcla de emociones. Lo vi cla

la. Un mensaje de "K".

léfono, pero era demasia

ada cruda y hambrienta. Una mira

a, guardando el telé

a-. Una emergencia con uno de los servidores

o -dije suavemente, mi voz con

o, su rostro una máscara de arrepenti

antes de que pudiera tejer más ment

fácil. Pensaba que era

lena. Volveré tan

distraído en la mejill

lándose en mi corazón. No iba a arre

ba a s