Su Traición, Mi Memoria Borrada
e fue un
taba en casa de Karla. El monitor de frecuencia cardíaca de mi reloj vinculado pulsaba violent
Mateo
queriendo que yo "creara un vínculo" con el niño. Dejándom
o. Estaba tirando juguetes,
argó contra mí y me embistió, su peq
, estallando instantáneame
oy a decir a mi pap
ra un arma, entre
! ¡Eres una muje
mi muñeca, el reloj mostraba que la frec
incesantes lamentos de Mateo desde arriba y la evidencia sil
me sentía com
. Nunca se apartó de mi lado. Me abrazó, me alimentó, me protegió del mundo. H
esposo volviera a casa de la cama de otra mujer, mientra
me obligué a ir a mi habitación, desesperada p
e abrió de
z Garza, irrumpió. Su ros
lavándose, y me sacó de la cama
ló. "¡Mateo tiene fieb
llí, de pie junto a la cama. Karla estaba a su lad
trocedió, cubriéndose l
tó, con la voz ahogada. "¡No m
iz me agarró del pelo, tiran
n tocador, la esquina clavándose en mis costillas. "¡Mataste a mi primer nie
a despreciado, mi origen de clase media u
olor recorriendo mi costado. "R
ulpa", sollozó. "No debería haberlo dejado con ella.
s ojos suplicantes.
Mateo. Sus piernas estaban cubie
Me abofeteó, la fuerza del g
rostro alguna señal de apoyo, alguna pista de qu
s eran
mi garganta. Les crey
baja y cargada de decepción.
iró la pared
das que habían aparecido en la puerta. "Enciérr
ombeo de la presa. Una habitación peq
g
miedo d
me arrastraran, m
la puerta con llave. El agua ya se estaba filtrando, fría y negra.
el agua azul de nuestra alberca, el silencio aterrador. El peque
ndome pacientemente, sosteniéndome en una alberca hasta que pude vol
smo terror para castigarme.
y la presión sofocante me envolvieron. Una
tro de Leo. Sonreía, ext
de mi ojo, mezclándo
mi vida con Elías. Todo es
jé hu